La Municipalidad de Córdoba la restauró y la equipó con un nuevo motor. Ahora será iluminada. Girará, pero no se podrá subir a los carros.
Volvió a girar la vuelta al mundo del parque Sarmiento de la ciudad de Córdoba. La histórica “rueda de Eiffel” llevaba años abandonada, luego de la reconstrucción que se había llevado a cabo en 2003. Ahora, la Municipalidad le incorporará alumbrado ornamental y tendrá un ciclo programado de funcionamiento para que vuelva a ser un punto turístico en la Capital.
La estructura está en uno de los puntos altos del Parque de la Biodiversidad, dentro de un sector que aún está con acceso restringido, en el circuito que llevaba hacia los recintos de los pumas, los tigres y el yaguareté. Está sobre la barranca que da a calle Amado Roldán, y tiene en frente a las escaleras del Coniferal.
La noria es conocida como la “rueda de Eiffel”, aunque no hay certezas de que haya sido fabricada por los célebres talleres metalúrgicos de Gustavo Eiffel, constructor de la Torre Eiffel en París. Llegó a Córdoba en 1918 procedente de la provincia de Tucumán, que la había comprado en 1916 pero no la había instalado.
La rueda se convirtió en una postal del parque Sarmiento, pero comenzó un proceso de deterioro que la fue destruyendo. Al empezar este milenio, se encontraba totalmente en ruinas. Tanto que no fue posible restaurarla, sino que se la tuvo que reconstruir.
El trabajo se realizó en 2003, como parte de la concesión del municipio al Superpark. Se desmontaron los restos, y la empresa Ingeniería Lozada Chávez construyó cada una de las piezas que permitieron la reproducción de la estructura circular de 12 metros de diámetro.
También se replicaron las 20 casillas, pero en lugar de ser de madera como las originales, se hicieron de acero.
La obra reconstruida también fue quedando en el olvido. Tanto que pasaron 20 años para que volviera a funcionar como parte de la creación del Parque de la Biodiversidad en lo que era el Zoológico.
A través del ente municipal Biocor, que administra el paseo, encaró la iniciativa nuevamente con la administración del Superpark, que será el encargado de mantenerla.
“Estaba abandonada, llena de palomas”, comentó el intendente Martín Llaryora. Julio Tejeda, vocal del Biocor, contó que lo primero que se hizo fue un estudio de suelo, para ver si resistía el peso de la estructura.
Luego, se revisaron las fundaciones de hormigón armado de las bases de la rueda. También se destrabaron y restauraron por completo las 20 cabinas y se revisó el estado del eje central. Se revisó, ajustó y balanceó la estructura de la rueda.
Se desarmó, y reparó el tren motriz, y se rectificó la corona de tracción; y se le sumó un sistema de freno electromecánico. Eso impide que la rueda gire con la fuerza del viento. Además, se realizaron pruebas de resistencia y balanceo con distintos momentos de vientos con la rueda en funcionamiento.
Se reparó la totalidad de los contactores del antiguo sistema de iluminación, hizo toda la instalación eléctrica nueva y se la repintó totalmente. Ahora se está subastando un sistema de iluminación ornamental, para que sea un atractivo de noche.
“La idea es que tengamos una nueva postal. Ya sea desde el Coniferal como desde el Parque de la Biodiversidad, que sea un atractivo turístico como lo fue en su momento”, afirmó Llaryora.
Hay que aclarar que la rueda no llevará a personas. Tendrá un fin meramente ornamental. Girará en momentos determinados del día, por turnos de unos tres minutos.
TRES MOMENTOS HISTÓRICOS
La rueda de Eiffel en su esplendor. La rueda se montó en una de las lomas del parque Sarmiento entre 1918 y 1930. Funcionó por unos 45 años, convocando a miles y miles de cordobeses, y protagonizando las postales más lindas de la ciudad.
Las ruinas. Ya en la década del ´80, la vuelta al mundo del parque Sarmiento estaba convertida en un amasijo de hierros retorcidos que ni siquiera permitían imaginar cómo era en su estado original. Y así se mantuvo durante más de 20 años.
La reconstrucción. En 2003, la Municipalidad de Córdoba le encargó a la empresa Superpark que reconstruyera la rueda de Eiffel. Desmontaron los restos, y un taller metalúrgico se encargó de replicar todas las piezas, para montarla nuevamente en el parque Sarmiento.
