Alimentación infantil, un debate necesario
En una sociedad donde los ultraprocesados dominan las góndolas y el marketing apunta directamente a los más pequeños, el chef Germán Martitegui plantea un debate que resuena en todas las familias: ¿Cómo garantizar una alimentación saludable para los niños? Sus recientes declaraciones en el programa Perros de la Calle han generado polémica y reflexiones en redes sociales, marcando la importancia de abordar esta problemática.
Martitegui, a sus 58 años, habló desde la experiencia de criar a sus dos hijos, Lautaro y Lorenzo, quienes nacieron hace cinco años a través de subrogación de vientre en Estados Unidos. Entre reflexiones y anécdotas, el chef compartió los desafíos de educarlos en la cultura de la comida saludable, en contraste con las tentaciones que enfrentan en eventos sociales como los cumpleaños.
“Es una droga”: la advertencia de Martitegui sobre los ultraprocesados
Con su característico tono crítico, Martitegui no dudó en calificar a los ultraprocesados como una adicción creada por la industria alimentaria. “La industria te prepara para que eso vaya directo al cerebro. Es una droga: tiene sal, azúcar y grasas saturadas, todo lo que necesita para volverte adicto”, señaló durante la entrevista.
En casa, Lautaro y Lorenzo crecieron en un entorno culinario diseñado con esmero. “Hasta que salieron de casa eran chicos que identificaban 30 tipos de verduras, 30 tipos de porotos distintos”, contó el chef entre risas. Sin embargo, el panorama cambia drásticamente en las mesas de cumpleaños, donde los alfajores, chizitos y salchichas se convierten en protagonistas.
El dilema de los cumpleaños: ¿cómo competir con los ultraprocesados?
“Este es un llamado para todas las madres y padres de la Argentina: no mandes a los chicos con una caja llena de galletitas compradas”, expresó Martitegui, reflexionando sobre los hábitos que se perpetúan en los eventos sociales.
Aunque el chef admite que no les impone restricciones a sus hijos en estos espacios, esta permisividad contrasta con el rigor de su hogar. “No les puedo decir nada”, confesó, reconociendo que los cumpleaños son un terreno donde las opciones saludables (zanahorias, tomates cherry, quesitos) suelen ser ignoradas en favor de las golosinas y snacks ultraprocesados.
Una polémica que dividió opiniones en redes sociales
Las declaraciones de Martitegui no pasaron desapercibidas y rápidamente generaron un intenso debate en redes. Mientras algunos aplaudieron su mensaje, otros lo señalaron como alejado de la realidad de muchas familias.
“Totalmente alejado de la realidad de las familias y de las posibilidades que ellas tienen. Habla desde la comodidad y desde la no carencia”, comentó una usuaria en redes. Por otro lado, otro testimonio destacó: “Hoy es más fácil comprar comida que cocinarla, y los nenes no se nutren”.
A pesar de las críticas, hubo quienes apoyaron la postura del chef, subrayando la importancia de educar a las próximas generaciones para que adopten hábitos más saludables.
Una batalla más allá de la cocina
La lucha de Germán Martitegui contra los ultraprocesados no solo busca alimentar cuerpos, sino también conciencias. En un contexto donde el marketing y la industria alimentaria parecen tener la última palabra, su mensaje invita a las familias a repensar las tradiciones alimenticias y promover un cambio desde el hogar.
¿Es posible transformar los hábitos de consumo en un entorno saturado de productos nocivos? Aunque la respuesta no sea sencilla, el debate que abrió Martitegui es un punto de partida para reflexionar sobre el futuro de la alimentación infantil en Argentina y el mundo.
