
El espaldarazo electoral que obtuvo el Gobierno en las últimas elecciones legislativas le otorga un plazo de gracia “de entre cuatro y seis meses”, pero en ese tiempo deberá encontrar un camino para la recuperación de la economía real que devuelva la confianza de los electores. Así lo interpretó el economista cordobés Diego Dequino en declaraciones a Canal C.
Dequino, quien participó del programa Córdoba al mundo, señaló que ve hacia fin de año muchas similitudes con lo que pasaba en diciembre de 2023, incluso con algunas mejoras respecto de la esperanza hacia el Gobierno.
Manifestó que vislumbra una mejor situación, porque “el esfuerzo más feo se hizo en el 2024 y en la primera parte del 2025”, por lo que la economía debería tender al crecimiento.
“Si se mantiene una apuesta por el peso fuerte, la economía tiene que crecer sino no hay moneda que se resista a devaluarse en el largo plazo. El Gobierno tiene de cuatro a seis meses para enlazar algunas medidas que saquen a la economía del letargo”, remarcó Dequino.

Consideró necesario que se logre sacar de la recesión a los sectores que están cayendo, como la construcción, la industria e incluso el comercio, para que la rueda vuelva a girar y se encuentre un sentido al esfuerzo por bajar el déficit fiscal.
“Si el gobierno no logra encender los motores, más allá de Vaca Muerta o el sector financiero, en cuatro o seis meses volverán los mismos interrogantes y se va a complicar la situación”, sostuvo.
Dequino dijo que existe “una ventaja de coyuntura en materia de ajuste hecho y la oportunidad para volver a los mercados de créditos por la baja del riesgo país”, lo que permitiría emitir bonos soberanos para “usarlos con responsabilidad”.
Aclaró que la reforma laboral es necesaria, pero por sí sola no traerá cambios a la economía real. Señaló que los resultados se verán a mediano plazo en la relación de empleo.



