
Lo que comenzó hace más de una década como una reunión entre fanáticos se transformó en una de las fiestas maradoneanas más emblemáticas del país. En esta edición, los organizadores prometen “una propuesta más ambiciosa y más Diego que nunca”, con actividades que cruzan arte, mística y cultura popular en el Museo de la Industria.

Entre las propuestas se destacan la serigrafía en vivo, donde el público puede estampar la imagen del 10 en su ropa, y la muestra del fotógrafo japonés Masahide Tomikoshi, quien retrató a Maradona fuera de la cancha, en su costado más íntimo y humano. También habrá una experiencia inmersiva llamada “El gol del Diego a ciegas”, que invita a revivir, sin ver, la emoción del histórico tanto a Inglaterra en México ‘86.
La programación incluye además pintura y tatuajes en vivo, lecturas de literatura maradoneana, tarot, astrología y la proyección del documental El 10. No faltarán el altar en homenaje al Diego, un espacio dedicado a las infancias y una feria de arte y diseño popular.
“El Diego sigue vivo en cada abrazo, en cada mural, en cada canción”, resumen desde la organización. Porque “El Mes del Diego” no es solo un homenaje: es un ritual de amor colectivo, una forma de mantener encendida la llama del ídolo que sigue uniendo a generaciones enteras.

Seguí leyendo:




