
La acupuntura —una de las terapias alternativas con mayor respaldo científico— demuestra eficacia clínica para dolor lumbar, cervical, ciático y artrosis, con mejoras funcionales sostenidas hasta un año. La Organización Mundial de la Salud (OMS) la incluye en su marco de medicina tradicional e insta a los países a regular su práctica.
Los protocolos más efectivos contemplan entre 6 y 12 sesiones iniciales, con un perfil de seguridad favorable cuando se utilizan agujas estériles descartables.
Las terapias alternativas han pasado de los márgenes a los consultorios de hospitales y obras sociales, impulsadas por la necesidad de opciones seguras frente al uso prolongado de analgésicos.
Dentro de este abanico, la acupuntura para dolor lumbar crónico destaca gracias a evidencia creciente que respalda su eficacia para distintas formas de dolor persistente.
La acupuntura consiste en la inserción de agujas muy finas en puntos estratégicos para modular vías nerviosas y liberar sustancias analgésicas internas.

La evidencia neurobiológica indica que esta estimulación libera endorfina, serotonina y norepinefrina, efecto similar a la TENS. Un estudio sobre dolor cervical crónico mostró alivio significativo durante al menos tres meses tras el tratamiento.
Estudios sobre lumbalgia y ciática muestran reducciones importantes en dolor y discapacidad luego de 10 sesiones, con efectos que perduran hasta un año.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) la incluye en su clasificación de medicina tradicional, complementaria e integrativa y alienta su regulación para garantizar calidad.
Cómo la acupuntura ayuda a aliviar el dolor crónico
La acupuntura activa el sistema de modulación descendente del dolor, estimulando la liberación de endorfinas, serotonina y norepinefrina que “apaguen” la señal nociceptiva en la médula espinal.Este efecto bioquímico ubica a la técnica entre las terapias alternativas con respaldo neurofisiológico más sólido.
Estudios de neuroimagen funcional muestran que, tras varias sesiones, se reajusta la conectividad del tálamo, la corteza prefrontal y la sustancia gris periacueductal, núcleos clave en el circuito analgésico. Dichos cambios se correlacionan con descensos significativos en la escala EVA de dolor crónico lumbar y cervical.
Además de la analgesia central, la acupuntura ejerce un efecto antiinflamatorio local, modulando citocinas como interleucina‑6, y favoreciendo la liberación de adenosina, que potencia la señal analgésica.

Esto explica por qué los pacientes refieren menos rigidez y mayor rango articular en artrosis de rodilla luego de ocho sesiones.
Existe una relación dosis‑respuesta: protocolos de 6‑12 sesiones en 4‑6 semanas logran mayores y más duraderos descensos de dolor, sobre todo cuando se combinan con fisioterapia y ejercicio de fuerza. Por su perfil de seguridad —eventos adversos menores y reversibles— se la considera opción de primera línea antes de recurrir a fármacos de larga duración.
Beneficios comprobados de la acupuntura en dolor crónico
- Alivio significativo del dolor lumbar y mejora funcional.
- Reducción sostenida del dolor y la rigidez en artrosis de rodilla, con efectos que perduran de 3 a 6 meses tras el alta.
- Disminución del dolor radicular y de la discapacidad en ciática causada por hernia de disco luego de 10 sesiones, con alivio mantenido hasta un año.
- Menor frecuencia y duración de migrañas: protocolos de 16 sesiones logran descensos de hasta 50% en crisis mensuales.
- Menos necesidad de opioides, gracias a la analgesia obtenida y la reducción de efectos adversos farmacológicos.
—