
¿Qué se entiende por sobrecarga? El término sobrecarga se refiere a una carga excesiva, algo que supera la capacidad normal o esperada de un sistema, organismo o estructura. En el contexto de la Medicina, este término adquiere una connotación particular y su interpretación puede variar dependiendo del área médica en la que se utilice.
Sobrecarga. Tal es el título de esta nueva producción de la artista multidisciplinaria Melisa Zulberti, comisionada por el Centro de Experimentación del Teatro Colón (CETC). La obra fue pensada e ideada especialmente para este espacio y tiene un puñado de funciones en lo que queda de octubre y los primeros días de noviembre.
Sobrecarga es una experiencia inmersiva verdaderamente conmocionante, con un espacio fílmico de tres pantallas, donde estamos casi sintiendo cada movimiento por la cercanía de la cámara, para entender claramente qué es una verdadera “sobrecarga”, en el sentido escénico de construir una metáfora del tiempo exigido, tan bella como inolvidable.
“Sobrecarga”, de Melisa Zulberti. Foto: Delfina Pignatiello/PrensaEs una experiencia que hace vibrar el cuerpo, no solo por el vértigo del sonido y las imágenes que despiertan muchas emociones fuertes, sino porque es como una tentativa ajustada en todos sus detalles para asistir en 50 minutos a lo que hemos naturalizado ampliamente en la vida contemporánea en relación a los sistemas de poder, de vigilancia, de esfuerzo por llegar a algún lado y, casi más contundente, a una vida cargada de violencias que se sienten en el cuerpo.
Multidisciplinaria
Melisa Zulberti (Argentina, 1989) cruza su práctica entre artes visuales, cuerpo, cine, diseño, música y tecnología, desplegando estructuras cinéticas y dispositivos que expanden la relación entre acción y espacio. En 2024, fue seleccionada a través de una convocatoria internacional de la Biennale di Danza di Venezia para coproducir Posguerra, convirtiéndose en la primera artista argentina en representar al país en este contexto.
Ha exhibido obras en museos y festivales de Argentina, Brasil, Francia, España, Italia y Suiza, colaborando con distintos artistas y creadores internacionales, entre ellos, Refik Anadol, con quien desarrolló una obra inspirada en su serie “Nature Dreams”. Actualmente ha sido seleccionada para participar en Artists’ Film International (AFI), representando a Argentina en la edición 2025, originalmente desarrollado por la Whitechapel Gallery (Londres) y actualmente organizado por FORMA (Reino Unido).
“Sobrecarga”, de Melisa Zulberti. Foto: Delfina Pignatiello/PrensaTanto en Posguerra como en Sobrecarga, los dispositivos y mecanismos escénicos actúan como intérpretes activos, generando tensiones entre lo humano y lo maquínico, lo íntimo y lo colectivo.
El grupo de bailarines abarca distintas edades, pero sus corporalidades son similares en tanto aparecen como verdaderos dispositivos expresivos que dan todo su esfuerzo en la performance, valiéndose de un expresionismo dinámico que lo dice todo con gestos y movimientos precisos.
La obra tiene un equipo multidisciplinario enorme que, el miércoles, en el preestreno, fue aplaudido ampliamente, como una forma de bajar la adrenalina emocional del cuerpo.
La artista Melisa Zulberti. Zulberti lo narra muy bien en su texto de difusión cuando sostiene que “vivimos en un tiempo de Sobrecarga. La sentimos todos los días: en la cantidad de mensajes que nos llegan, en la velocidad con la que cambia lo que ayer parecía estable y en la exigencia de estar siempre disponibles. La obra intenta poner en escena un estado de época: la tensión de un cuerpo que resiste mientras el sistema insiste. Un cuerpo que se expone, que se exige, pero que también busca fisuras para escapar, para reinventarse y para seguir”.
Sobrecarga digital, tecnológica, humana. Sobrecarga en lo vincular, cuando los encuentros también se vuelven breves, acelerados, atravesados por pantallas. Sobrecarga política y social, cuando los sistemas de control marcan el ritmo de nuestras vidas y nos cuesta encontrar un espacio propio. No la dejen pasar, conmueve hondamente, aunque se sienta a través de máscaras de los rostros más siniestros que no queremos ver. Es una catarsis positiva en tiempos de repetición vacía.
*Sobrecarga se presenta del 23 de octubre al 2 de noviembre, en el Centro de Experimentación del Teatro Colón.
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