Wanda Nara se encuentra en el ojo del huracán mediático tras su escandalosa separación con el futbolista Mauro Icardi. En medio del drama legal por la casa que compartían en la Avenida del Libertador, la empresaria permitió que su ex se quedara en la lujosa mansión en el country Santa Bárbara, Nordelta, en Buenos Aires.
Meses atrás, cuando llegó al país para hacer el reality de repostería, Bake Off Argentina, habló sobre el cariño que tiene por esa propiedad (apenas una de las tantas que posee). “Si seré conservadora. Esta casa la tengo hace 15 años. Cada vez más linda la tengo”, escribió Wanda junto a una foto del exterior de la propiedad.
La imagen muestra un extenso parque con una piscina que bordea un lago, un verdadero oasis de tranquilidad en medio del bullicio mediático.
Un hogar familiar con historia
Esta imponente mansión fue adquirida por Wanda tras su divorcio con Maxi López, padre de sus tres hijos varones. Con 1.800 metros cuadrados, siete ambientes, cinco baños, cinco dormitorios, un toilette y dos cocheras, la propiedad es un reflejo del éxito profesional de la mediática.
Entre sus comodidades, destaca una sala de cine privada, perfecta para disfrutar momentos en familia.
La piscina da al lago y tiene solarium y una galería con una amplia mesa que permite la estadía de numerosos comensales. La perlita: un muelle privado.
En la planta alta cuenta con baño principal, un gran vestidor y la salida a terraza con vista al lago. Además, escritorio y tres cuartos, dos de ellos en suite.
Wanda, entre la familia y el escándalo
Wanda se encuentra en Argentina para grabar la nueva temporada de Bake Off Argentina (Telefe). A pesar del escándalo con Icardi, la empresaria prioriza a sus hijos y disfruta del tiempo en familia.
Su expareja Mauro Icardi, en una estadía corta en el país, está viviendo en esa propiedad. Recientemente, el futbolista publicó fotos y videos de Wanda tomando mates con él en esa casa, lo que generó revuelo en las redes.