¿Cuál es la ramificación que logra unificar al deporte y la nutrición con su público? La comunicación. El uso de los “reels” permite que un usuario ahonde con más detalles sobre los elementos esenciales que necesita para comenzar cualquier actividad deportiva, como la natación o el futbol.
El deporte dejó de ser un espacio para un grupo en específico. Un ejemplo de ello lo demostró en fenómeno “Franco Colapinto”, quien por su carisma y personalidad Logró cautivar al público argentino a más no poder. “Más allá de ser un piloto argentino, es una persona muy carismática, tiene una cuestión muy seductora, de tener muy buena onda con los periodistas, es muy espontáneo y genuino cuando da las entrevistas, no tiene esta cosa tan estructurada de los pilotos de la Fórmula 1″, sentenció Florencia Andersen, una periodista deportiva, sobre Franco Colapinto.
Esa atracción inmediata por el rubro deportivo dio pie a que surgieran nuevas historias bajo el género “romance deportivo”. Entre los relatos más populares para 2025 es “Tan rápido como quieras”, la nueva novela escrita por Flor Zimmerman que trae consigo una historia por sí misma vinculada con el deporte.
Los influencers de Flor Zimmerman que marcaron sus inicios
-Hablemos un poco de tu infancia, ¿tuviste algún tipo de conexión con la comunicación seguido desde pequeña o fue conforme ibas creciendo?
Bueno, mis papás son psicólogos, así que siempre me interesó mucho entender la cabeza humana y cómo nos relacionamos las personas. Siempre fui como muy inquieta. En ese sentido, mis papás como que me estimularon mucho culturalmente y siempre había conversaciones profundas o muy abiertas.
Pero lo literario, yo creo que me vino por mi abuelo paterno, Héctor Zimmerman. Era escritor, periodista e hizo casi todo en la literatura menos novelas. Por eso digo que escribo novelas porque es lo único que dejó sin hacer. Él era editor de muchas revistas, entrevistó a gente superconocida. Era un genio y bueno, escribía poesía, escribía cuentos, hacía traducciones y fue como mi gran maestro.
Una vez a la semana, o cada 15 días, iba a su casa a almorzar o tomar el té, y pasábamos el tiempo leyendo algo juntos. Lo analizábamos, o yo le llevaba algo que había escrito y lo corregíamos, o incluso escribíamos algo en conjunto. Así que, aunque después estudié Comunicación Social, hice algunos talleres literarios y demás, siempre digo que mi gran maestro fue mi abuelo.
– De alguna manera, tu abuelo fue como el puntapié para después decir “Me quiero dedicar un poco a esto y o me gusta la escritura más como un ámbito profesional”.
Sí, yo digo que fue mi influencer literario.
– ¿Y qué analizaban en ese entonces? ¿Cuáles eran los libros o los fragmentos que solían estudiar?
Al principio, llevaba cosas que tenía que analizar para el colegio, como cuentos de Borges, Cortázar, pero solo tenía que escribir uno o dos párrafos para cumplir con la tarea. Sin embargo, terminábamos pasando tardes y tardes juntos. Con el tiempo, empecé a buscar lecturas para mí, por hobby, y las compartíamos y analizábamos juntos.
Y la verdad que él era muy moderno para su época. Por más que nos llevábamos muchísimos años, él siempre fue joven, siempre fue moderno y creo que tengo mucho de sus consejos en mi escritura.
– ¿Que tips y consejos de escritura tienes presente de tu abuelo?
Él quería una escritura en la que lo que brillara fuera la historia. Buscaba que las cosas fueran lo más simples posible. Si ibas a contar algo de manera compleja, entonces esa era realmente la mejor forma de hacerlo. Creo que muchos escritores, especialmente los más jóvenes, a veces cometen el error de querer lucirse tanto que terminan haciendo todo demasiado enrevesado y complicado, cuando podría ser mucho más simple.
– ¿A partir de estos tips, sueles jugar un poco con los géneros a la hora de hacer tus novelas?
Mi código es que no haya bodoques y bodoques y bodoques de texto. Yo juego mucho con la intertextualidad, rompo mucho el texto. Si vos leés, por ejemplo, “Tan rápido como quieras” en el medio hay artículos. Victoria, la protagonista, es periodista y en el medio hay artículos periodísticos y la trama va avanzando a través de esos escritos que ella va publicando.
De sus tardes de escritura a las mañanas de atletismo con un toque de redes sociales
– Ya encaminándonos un poco en línea cronológica, ya estás en la facultad, te graduaste de comunicadora. Al recibirte, ¿Cómo surgió la idea de crear contenidos en redes sociales?
Yo siento que nací para comunicar, como si fuera mi misión en la vida. Pero me resistí por miedo. ¿Viste que a veces conviven en ti lo que crees que debería ser con lo que realmente querés ser? Sin embargo, mis papás, por suerte, siempre me dieron mucha libertad para seguir lo que sintiera, aunque yo tenía ese miedo al prejuicio, al “¿cómo voy a vivir de la comunicación?”. Entonces, empecé la carrera de economía y pronto me di cuenta de que no era lo que me apasionaba. Ahí fue cuando mis papás me dijeron: “Si algo te gusta de verdad, vas a encontrar la forma de hacerlo.”
Con esas palabras me pasé a la carrera de comunicación. En cuanto a las redes, también surgió medio como que la vida me fue llevando y yo estuve ahí, muy abierta a las oportunidades que me iban apareciendo. No fue algo planificado, yo tenía mis redes personales y como mis amigas son muy relajadas con las fotos, no se querían sacar. Entonces, paralelamente empecé a correr y eran las únicas fotos que tenía porque las carreras hay.
A mí me gusta escribir y siempre para mí comunicar es un acto reimportarte. Aunque tenía solo 100 seguidores, aunque solo me seguía mi tía Berta, yo sentía que si tenía la oportunidad de comunicar algo tenía que hacerlo bien entonces. En ese momento, Instagram era más de fotos que de vídeos, entonces le ponía bastante onda a los textos y si iba a dar algún tip chequeaba con especialistas y me preocupaba que estuviera bien redactado y que la foto transmitía algo lindo. Entonces bueno, tenía como todos esos y bueno, y ahí fueron creciendo mis redes porque siempre la sucede de manera.
– ¿Y con respecto al running? ¿Fue tan orgánico como cuando comenzaste a crear contenido en redes sociales, o cuál es la historia detrás de esta pasión?
Siempre digo a tono chiste medio en serio que empecé a correr para que no me echaran del trabajo (risas). Tenía un jefe que era triatleta y me desafió a correr mi primer 10 kilómetros. Entonces yo dije, ¿se corre como se vive, no?
Tenía ganas de hacerlo desde hace mucho y no me animaba. Por ende, me subí a la excusa de que me iban a echar que claramente va. Así surgió este medio. Por casualidad o causalidad.
– ¿De alguna manera consolidaste un público de nicho para deportistas o personas que buscan adentrarse al mundo del atletismo?
Sí, además, en ese momento no había mucha gente que se enorgulleciera de ser un corredor aficionado. Los que comunicaban sobre running en redes eran principalmente las marcas, los profesionales de la salud o los atletas de élite. Yo, en cambio, me puse la camiseta de amateur con orgullo, y la verdad es que la vida de un aficionado es muy distinta a la de un profesional del deporte.
“Tan rápido como quieras”, la última novela de Flor Zimmerman que promete rapidez y romance
– Respecto a tu último libro “Tan rápido como quieras” ¿Qué conexión tiene el titulado respecto a tu pasión por el running y cómo surgió la idea de la historia?
Es también casualidad o causalidad (risas). A ver, a la editorial le surgieron ganas a hacer un libro de Fórmula 1 y me lo propusieron a mí porque había escrito un Sport romance que había tenido muy buenas críticas. Entonces, bueno, me vinieron a ofrecer el desafío y lo acepté por sumo orgullo pero también con rigurosidad.
Me puse a estudiar porque obviamente quería contar bien este mundo, que además es un mundo muy complejo, porque no solo están todos los tecnicismos y las reglas del deporte. Si no que hay un montón de personajes, desde el corredor de autos hasta el ingeniero y representante. Asimismo, hay mucho “glamour”, un glamour que acá en Argentina no estamos acostumbrados a fiestas de una opulencia que también tuve que ponerme a ver, aprender a y también pasa por muchos países.
– ¿La propuesta de la editorial vino en función del Boom por la Fórmula 1 con la llegada de Franco Colapinto?
En realidad, el “boom” lo podría situar un poco antes de que Franco Colapinto llegara a la Fórmula 1. Por ejemplo, gracias al estreno de la serie Drive to Survive de Netflix, la gente logró conectar con el automovilismo porque se muestran a los deportistas desde un lado más humano. Así que, hace algunos años, ya se venía gestando este auge, y, por supuesto, la llegada de Franco Colapinto lo exacerbó aún más.
– Siguiendo con Franco y Guido, uno de los personajes principales, hay una frase del libro que explica que los pilotos son seductores por su constante coqueteo con la muerte y la adrenalina. ¿Crees que eesa frase define la atracción del público por la Fórmula 1?
Creo que lo que tiene la Fórmula 1, a diferencia de la mayoría de los deportes, es que está en riesgo tu vida. Cuando vos jugás al fútbol el peor escenario es estar un mes afuera del juegos. En el caso del autmovilismo, es realmente su vida, o sea, los accidentes son fatales y creo que hay algo de la pulsión de muerte que nos hace ver esto.
La gente los ve un poco deseando que esté todo bien y un poco con con esa adrenalina que te corre saber que está la vida en riesgo, que están haciendo algo que además en condiciones normales está prohibido, que es el exceso de velocidad. Es un deporte que se juega en algo prohibido.
– Victoria es la protagonista de la historia, quien obtiene la oportunidad de cubrir las carreras de Guido ¿De qué manera este personaje refleja la evolución en el ámbito periodístico respecto a la cobertura en la Fórmula 1?
Yo creo que el personaje Victoria lo que nos permite es ir aprendiendo a través de ella, entonces lo que nos pasa es que el libro está hecho para que el que sabe un montón de automovilismo le guste ver algo que le fascina tanto reflejado en una en un romance, Porque, en general, el que es muy fanático le gusta que ese mundo esté presente en sus obras literarias. Y el que no sabe nada, aprende con Victoria de una manera medio solapada. No es que tiene un diccionario, vamos aprendiendo con ella, entonces no te deja afuera.
– “Tan rápido como puedas” es de los libros más vendidos en las librerías Cúspides ¿Cómo te sientes con la recepción que ha tenido?
La verdad es que no lo puedo creer, era un sueño que teníamos y es muy simbólico, porque me da mucha alegría y orgullo. Fue un sueño muy presente tanto para mí como para mi editora, quien, la verdad, fue una parte fundamental del equipo en este proyecto. Me hizo muy feliz por mí y también por ella.
Y también me pone muy contenta que la gente le dé una oportunidad a la ficción nacional porque es muy difícil para los autores argentinos competir con los tanques que llegan de afuera, que tienen un nivel de publicidad y marketing que que acá es imposible. Sobre todo en lo que es literatura juvenil que corren mucho por las redes sociales. Es muy difícil para autores nuevos nacionales y poder estar ahí fue muy emocionante.
Cuál es el siguiente maratón de Flor Zimmerman
Finalmente, Flor Zimmerman está lejos de culminar su carrera. Tras el éxito de “Tan rápido como puedas” la periodista prevé disfrutar del momento para así encargarse de su tercera novela, que estaría un 70% culminada. “Este mes es para para las para los lectores, pero tengo una novela al 70%”, destacó la influencer y escritora con emoción.
“Tan rápido como quieras” se encuentra disponible en todas las librerías argentinas. La misma cuenta con más de 237 páginas, fue editado por Penguin Random House y sigue la historia de un romance deportivo entre un rookie de Fórmula 1 y una periodista. ¿Es posible frenar la velocidad a la que late un corazón? La respuesta está en la historia.
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