A casi 18 años del crimen que conmocionó a la ciudad de Río Cuarto y al país entero, el parquetista Roberto Marcos Barzola, de 45 años, ha sido identificado como el principal sospechoso del femicidio de Nora Dalmasso.
Este avance se logró luego de que un análisis genético determinara que los rastros encontrados en el cinturón de la bata utilizada para estrangular a la víctima y en un vello hallado en su zona púbica coinciden con el ADN del sindicado. Barzola había trabajado en la casa de Dalmasso en la semana previa al crimen, realizando tareas de pulido de pisos.
Barzola, nacido y residente de Río Cuarto, tenía 27 años en noviembre de 2006, cuando Nora fue hallada sin vida en su vivienda. A pesar de haber declarado en varias ocasiones como testigo, su perfil genético no fue incluido en los análisis iniciales, a pesar de las solicitudes de la defensa del viudo y de la propia madre de Dalmasso, quien había señalado al parquetista como la única persona con quien su hija había tenido conflictos recientes.
En una de las declaraciones que brindó, el parquetista aseguró: “La única vez que tuve contacto verbal con la señora Nora Dalmasso fue el día viernes 24 de noviembre en horas de la mañana porque había mucho polvillo que se había desparramado en la cocina por la máquina pulidora”.
La identificación de Barzola como sospechoso llegó gracias a los nuevos esfuerzos liderados por el fiscal Pablo Jávega, quien ordenó más de 200 pruebas genéticas en busca de resolver el caso. Aunque el ADN de Barzola ha sido vinculado directamente a las evidencias halladas en la escena del crimen, la causa prescribió, lo que impide que el parquetista sea detenido o condenado, al menos bajo las normativas actuales.
