
La confirmación de los resultados de ADN reveló que los restos hallados en un placard del departamento de Horacio Grasso corresponden a Milagros Micaela Basto, una joven de 22 años que estaba desaparecida desde agosto de 2024. El hallazgo tuvo lugar en el marco de una investigación que mantiene detenido al expolicía, condenado en 2007 por el crimen de Facundo Novillo, y que ahora enfrenta nuevas imputaciones junto a su hermano Javier.

Milagros, oriunda de barrio Renacimiento, había sido vista por última vez el 6 de agosto en barrio Bajo Pueyrredón. Según fuentes judiciales, atravesaba problemas de adicciones y vivía en situación de calle, aunque mantenía contacto esporádico con su familia para visitar a su hijo.
Tras su desaparición, su entorno inició una intensa búsqueda que incluyó publicaciones en redes sociales y una marcha en diciembre de 2024 para exigir su aparición con vida, en medio de reclamos por la escasa visibilidad mediática del caso.

Con la identidad confirmada, la fiscalía a cargo de José Bringas avanza en una nueva etapa de la investigación para determinar las circunstancias y la fecha del crimen, así como la relación que pudo haber tenido la joven con Grasso. Las pericias y declaraciones serán claves para reconstruir las últimas horas de vida de Milagros y esclarecer los detalles de un caso que causa conmoción en Córdoba.
