El Banco Central de la República Argentina (BCRA) reinstauró este viernes una medida clave del cepo cambiario: a través de la Comunicación “A” 8336, estableció que toda persona física que acceda al dólar oficial deberá firmar una declaración jurada comprometiéndose a no operar con dólar MEP ni contado con liquidación (CCL) durante los 90 días siguientes.
La resolución modifica la Normativa Exterior y Cambios, específicamente la sección 3.8, y extiende una restricción que hasta hace una semana solo aplicaba a directivos y accionistas de entidades financieras. El objetivo es frenar la maniobra conocida como “rulo” o arbitraje, que consiste en comprar dólares al tipo de cambio oficial y venderlos en mercados financieros donde la cotización es más alta, obteniendo ganancias inmediatas.
La medida llega en un contexto de presión cambiaria y reservas negativas, tras la venta de 1.100 millones de dólares por parte del BCRA sin lograr contener la suba del dólar. Con el respaldo de Estados Unidos —que prometió un swap de USD 20.000 millones y la compra de bonos argentinos— y la baja de retenciones que permitió adelantar exportaciones por USD 7.000 millones, el Gobierno intenta frenar la sangría de divisas y recuperar control sobre el mercado. Sin embargo, la decisión generó inquietud entre inversores, que observan con preocupación el regreso de restricciones que habían sido levantadas meses atrás.
