Por qué el turismo extranjero se desplomó en EEUU este 2025 bajo el segundo mandato de Trump

La industria turística de Estados Unidos atraviesa 2025 con un panorama inédito: mientras la mayoría de los países del mundo registra un repunte en la llegada de visitantes internacionales, la economía más grande del sector a nivel global aparece como la única en retroceso. Expertos, ejecutivos y autoridades locales vinculan la caída con el regreso de Donald Trump a la presidencia y con políticas que, según coinciden, generan un efecto disuasorio sobre los viajeros.

En febrero comenzaron a hacerse visibles señales de un freno en el flujo de turistas hacia Estados Unidos. Lo que en un principio parecía un ajuste estacional se transformó en tendencia persistente. De acuerdo con el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), los ingresos por visitantes internacionales caerán este año hasta los 169.000 millones de dólares, frente a los 181.000 millones de 2024. Eso supone una pérdida neta de 12.500 millones y consolida una baja de 22,5% en comparación con el pico alcanzado antes de la pandemia.

El retroceso se siente en distintos puntos del país. Las cifras oficiales confirman la tendencia. Según la Oficina Nacional de Viajes y Turismo, en los primeros siete meses de 2025 ingresaron 3 millones menos de visitantes de ultramar que en el mismo período del año anterior. La categoría excluye a viajeros de México y Canadá, pero el retroceso en estos países también es significativo.

En julio, la agencia estadística de Canadá registró un dato inusual: por primera vez en casi dos décadas -salvo en meses puntuales de pandemia- más estadounidenses cruzaron hacia Canadá que canadienses en dirección contraria. Ese mes, los viajes de retorno de residentes canadienses desde Estados Unidos en automóvil cayeron 37% interanual y los viajes aéreos, 26%.

Los analistas coinciden en que las políticas impulsadas desde la Casa Blanca son un elemento central. Foto: Brendan Smialowski / AFPLos analistas coinciden en que las políticas impulsadas desde la Casa Blanca son un elemento central. Foto: Brendan Smialowski / AFP

En la costa oeste, de acuerdo a datos de The Associated Press, el aeropuerto Harry Reid de Las Vegas reportó menos arribos internacionales que en temporadas previas, pese a que la ciudad suele ser un imán para visitantes de Asia y Europa. En Florida, las asociaciones hoteleras advirtieron sobre reservas internacionales más débiles, aunque la demanda doméstica ayudó a compensar.

El efecto disuasorio

Los analistas coinciden en que las políticas impulsadas desde la Casa Blanca son un elemento central. Trump reinstaló un veto de viaje que afecta principalmente a países de África y Medio Oriente, endureció las normas de visado y multiplicó las redadas migratorias. A eso se suma una agenda económica marcada por tarifas aduaneras a múltiples productos importados y declaraciones polémicas sobre la posibilidad de anexar territorios como Canadá o Groenlandia.

El clima de desconfianza se traduce en cancelaciones. Y la merma es clara también en Europa occidental: las llegadas desde Dinamarca bajaron 19%, las de Alemania 10% y las de Francia 6,6%. En Asia, los descensos llegaron a dos dígitos en mercados como Hong Kong, Indonesia y Filipinas. África también mostró menor presencia en aeropuertos estadounidenses.

Sin embargo, algunos países escapan a la tendencia. Argentina, Brasil, Italia y Japón incrementaron su volumen de viajeros hacia Estados Unidos. El aumento, aunque parcial, permitió morigerar la caída global.

El WTTC advierte que la contracción internacional erosiona el liderazgo histórico de Estados Unidos como destino. En 2019, antes de la pandemia, los turistas extranjeros habían generado 217.000 millones de dólares en ingresos y sostenido casi 18 millones de empleos. Hoy esa base se achica.

Estados Unidos es el único país, entre 184 analizados, que registrará un descenso en gasto internacional durante 2025. Foto: Michael Nagle/BloombergEstados Unidos es el único país, entre 184 analizados, que registrará un descenso en gasto internacional durante 2025. Foto: Michael Nagle/Bloomberg

Impacto económico más amplio

El turismo representa un engranaje importante de la economía nacional. Según el WTTC, el sector aportó 2,6 billones de dólares al PBI en 2024, con más de 20 millones de empleos asociados y 585.000 millones en recaudación fiscal. La caída en visitantes extranjeros amenaza con debilitar esa contribución.

El organismo advierte que Estados Unidos es el único país, entre 184 analizados, que registrará un descenso en gasto internacional durante 2025. En contraste, Europa y Asia muestran crecimientos sostenidos gracias a estrategias de apertura y campañas de promoción coordinadas.

Julia Simpson, presidenta y directora ejecutiva del WTTC, calificó la situación como un “llamado de atención”. “El país más grande en viajes y turismo avanza en la dirección equivocada, no por falta de demanda, sino por no actuar. Mientras otras naciones ponen la alfombra roja, el gobierno estadounidense exhibe un cartel de ‘cerrado’”, afirmó.

Los expertos coinciden en que, sin un giro en políticas y en el discurso oficial, la pérdida de atractivo internacional podría prolongarse más allá de 2025. “Sin medidas urgentes para restaurar la confianza del viajero, pasarán años antes de recuperar siquiera los niveles previos a la pandemia”, advirtió el WTTC.

Mientras tanto, el mercado se adapta. Organismos locales de promoción turística buscan diversificar sus campañas y atraer públicos domésticos o regionales. Sin embargo, muchos reconocen que el impacto de la ausencia de visitantes extranjeros es difícil de reemplazar.

La paradoja es que, al mismo tiempo, los estadounidenses viajan más al exterior. Esa asimetría, con un flujo de salida en alza y una llegada en baja, alimenta la sensación de que Estados Unidos está perdiendo terreno como destino global.

fuente: CLARIN

Artículos Relacionados

Volver al botón superior

Adblock Detectado

Considere apoyarnos deshabilitando su bloqueador de anuncios