
En un hecho sin precedentes para la salud pública en Córdoba, el Hospital Tránsito Cáceres de Allende realizó dos cirugías cerebrales con pacientes despiertos, una técnica de vanguardia que permite preservar funciones vitales como el lenguaje y las emociones durante la intervención. Se trata de la primera vez que un hospital público aplica este procedimiento, lo que lo convierte en un avance histórico dentro de la medicina nacional.
El método, impulsado por el Servicio de Neurocirugía, se diferencia de las cirugías tradicionales porque brinda la posibilidad de estimular y evaluar en tiempo real las capacidades cognitivas del paciente mientras se extirpa el tumor. De este modo, los profesionales aseguran que no se dañen áreas críticas del cerebro, especialmente cuando las lesiones se ubican en zonas de alta complejidad funcional.

Las intervenciones fueron posibles gracias al trabajo coordinado de más de 20 especialistas, entre neurocirujanos, anestesiólogos, neuropsicólogos y personal de enfermería. Según explicó el director del hospital, Marcelo Barbero, el logro refleja la excelencia y compromiso del equipo multidisciplinario, además del apoyo del Gobierno provincial para consolidar un servicio de neurocirugía de referencia.
El uso de herramientas tecnológicas de última generación fue clave para alcanzar estos resultados. El exoscopio permitió obtener imágenes ampliadas y precisas del campo quirúrgico, mientras que la neuronavegación funcionó como un “GPS” para guiar a los cirujanos y evitar zonas de riesgo. Con este abordaje, se logra no solo una recuperación más rápida, sino también preservar funciones cognitivas esenciales, lo que representa una mejora significativa en la calidad de vida de los pacientes.
