El representante de futbolistas Martín Ariel Guastadisegno volvió a quedar en el centro de la escena tras la salida de Luca Scarlato (categoría 2009), figura de la Séptima División de River e integrante de las selecciones juveniles argentinas, quien dejó la institución en condición de libre por patria potestad, una vía ampliamente cuestionada por los clubes formadores debido a la falta de compensación económica.
La operación dejó a River sin recibir ningún resarcimiento por un futbolista formado durante años en sus divisiones inferiores y se suma a otros antecedentes que, según dirigentes e integrantes del fútbol formativo consultados por este medio, responden a un patrón reiterado.
Guastadisegno ya había participado en movimientos similares en el pasado. Uno de los casos más resonantes fue el de Matías Soulé, quien dejó Vélez a los 15 años mediante el mismo mecanismo antes de ser transferido a Juventus.
Otro antecedente es el de Joaquín Panichelli, juvenil surgido de River que emigró sin reconocimiento económico para el club y hoy se desempeña en el fútbol europeo en un gran nivel. Es figura y goleador sensación del Racing de Estrasburgo en la Ligue 1 francesa. En esta última operación también participó Darío Bombini, representante histórico de Leonardo Ponzio y Germán Pezzella, quien figura como socio de Guastadisegno en distintas gestiones.
El caso Scarlato
En relación con Scarlato, fuentes cercanas al entorno del futbolista indicaron que el representante habría ofrecido un incentivo económico a la madre del jugador que rondaba los 200 mil dólares aproximadamente para que el juvenil no firmara contrato profesional con River, pese a las distintas propuestas formales y deportivas realizadas por la institución a lo largo de 2025.
De confirmarse, la decisión de salida no habría estado motivada exclusivamente por razones futbolísticas, sino por un acuerdo económico previo, según coinciden las fuentes consultadas.
Facturación y perfil patrimonial
Si bien su actividad declarada ante los organismos fiscales figura como “servicios empresariales n.c.p.”, los ingresos de Guastadisegno provendrían mayormente de operaciones vinculadas a la representación de futbolistas en mercados como Italia, España, Inglaterra, Estados Unidos, México y Brasil.
De acuerdo a registros comerciales y fiscales consultados, durante 2025, el agente de fustoblistas habría registrado facturación al exterior superior al millón de dólares, incluyendo ingresos asociados a transferencias internacionales de jugadores que representa. Sin embargo, según consta en información oficial, opera con una estructura mínima, con apenas dos empleados formales declarados.
Ante esta situación, personas con conocimiento de inspecciones tributarias señalaron que Guastadisegno habría sido fiscalizado en más de una oportunidad, detectándose “diferencias entre movimientos bancarios y lo declarado, inconsistencias en facturación electrónica y desajustes significativos”, aunque no existen causas judiciales públicas confirmadas al respecto.
En paralelo, su perfil patrimonial muestra un nivel de gastos elevado, reflejado en la adquisición reciente de varios vehículos de alta gama. Registros públicos de patentes indican que en el último año incorporó automóviles como BMW M2 Coupé, Porsche 911 GT3 RS y Audi S3 Sportback, entre otros, un contraste que genera interrogantes en el ambiente sobre la coherencia entre ingresos declarados y estilo de vida.
El vínculo con Roc Nation
En el plano internacional aparece Roc Nation, la agencia brasileña que mantiene vínculos operativos con Guastadisegno. Según dirigentes y agentes consultados, la estrategia conjunta priorizaría la rápida colocación internacional de juveniles, incluso antes de la firma de su primer contrato profesional en Argentina.
Bajo ese esquema se habrían intentado desviar operaciones como la de Santino Andino, cuyo arribo a River se frustró ante la intención de llevarlo al fútbol italiano o brasileño. En la actualidad, Scarlato aparece vinculado a posibles destinos como el Parma, en Italia. Y es un nuevo caso en el que la institución de Núñez pierde frente a una polémica maniobra de un representante inescrupuloso.
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