Los perfumes no solo complementan un look: son un sello de identidad. Cada aroma se vincula con emociones y recuerdos, dejando una marca en quienes nos rodean. La elección de una fragancia puede decir mucho sobre quiénes somos y cómo nos presentamos al mundo.
Cómo elegir según tu carácter
Jimena Ghioldi, formadora de Fragancias de L’Oréal Groupe, aconseja elegir perfumes que reflejen la personalidad: para personas seguras, La Vie Est Belle Vanille Nude de Lancóme resalta el lado más íntimo y poderoso; los audaces pueden optar por Libre L’Eau Nue de Yves Saint Laurent; quienes buscan diversión tienen en O de Lancóme un aroma fresco y estimulante; los determinados se identifican con Polo 67 Eau de Parfum, y los auténticos encuentran en Acqua Di Gio Profondo Eau de Toilette la frescura y energía que los define.
Aromas que despiertan emociones
Cada fragancia combina notas únicas: jazmín, vainilla, almizcle, especias y acordes amaderados, que se mezclan con la piel y crean recuerdos que permanecen. Según la experta, el aroma elegido permite transmitir confianza, estilo y esencia personal, convirtiéndose en una carta de presentación olfativa.
El perfume como extensión de tu identidad
Elegir una fragancia no es un acto menor: se trata de conocerse, de proyectar la personalidad y de dejar una impresión duradera. Encontrar el perfume adecuado permite que cada persona se sienta auténtica, memorable y segura en cada interacción.
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