Ya se encuentra en tribunales, la denuncia contra la Intendente de Monte Cristo Verónica Gazzoni.
INFORME EXCLUSIVO. Desde hace unos meses a esta fecha, esta redacción viene informando los distintos avatares de este hecho, que como lo anticipó Enfoque Urbano en sus ediciones anteriores, ha llegado a la justicia.
El polémico caso salió a la luz cuando el municipio informó sobre una serie de trabajos realizados en el pasaje llamado Anastacia Ludueña, en barrio Nuevo Amanecer, cuya revalorización y puesto en valor, destinado a los artesanos, con el objeto de crear un nuevo “punto cultural”, cuyas obras quedaron inauguradas en el pasado mes de Mayo con la presencia de autoridades municipales.
Un dato muy particular y no es casual que todo se habría iniciado, justamente el mismo día del fallecimiento de Guillermo Cáceres quien fuera el abogado de la municipalidad de Monte Cristo durante la gestión anterior.
Todo haría indicar, que ya sin vida el letrado; la municipalidad, en mente de la actual Intendente, arengada por el poder del mandamás Secretario General Ariel Laborde, potenciaron salir con los tapones de punta contra quien también fuera un referente político en nuestra localidad. En ese afán de aniquilar a su adversario, Gazzoni y sus asesores, habrían puesto la mira en una fracción de terreno perteneciente al barrio Nuevo Amanecer, en este presente conocido como el Pasaje de los Artesanos.
Como es sabido, la Mutual Villa Inés, creada en el año 1987, tenía como Presidente al padre de la actual Intendente de la ciudad, habría incurrido en un incumplimiento con los dueños de las tierras, en referencia a la familia Nemirovsky.
Dicha disputa de reclamos cruzados perduró inclusive hasta la finalización de la gestión de Fernando Gazzoni, quien habría pedido a sus colaboradores durante su intendencia una solución al problema. El letrado municipal era, en ese entonces, Guillermo Cáceres quien tomara la posta para llegar a un acuerdo. Fue así que, una de las salidas era terminar con un espacio verde, donde se debía construir una plaza para subdividirla en lotes, venderlos y de esa forma saldar el valor reclamado por el dueño de esas tierras.
La venta de lo que debía ser una plaza, al parecer contó con la complicidad de varios profesionales, los que incluirían, algunos empleados de nuestra municipalidad, según los últimos dichos manifestado por Marcelo Mercante, en declaraciones en la emisora radial de Luis Alegría, antes de su deceso.
Al parecer, con el escenario despejado, y con la pretensión de aniquilar a su adversario político, Elvira finalmente habría tomado coraje y se atrevió, ordenando a empleados municipales que ingresaran al lote, sumado a la contratación de empresas privadas de nuestra localidad, para que con maquinarias procediera a derribar el alambrado y arrasar con todo lo que habría dentro del terreno adquirido por una familia de la zona, donde en este presente es el Pasaje de los Artesanos y que según expresan desde el municipio, les pertenece; olvidándose de que hacía ya tiempo, tanto Marcelo Mercante como la vecina, dueña del lugar, venían reclamado el servicio de agua.
Ante los primeros pasos del avasallamiento de propiedad sufrido por la dueña del lote, ésta procedió a radicar una denuncia penal en contra la Intendente Verónica Gazzoni, la que marcharía con viento en popa.
¿El Municipio, flojo de papeles?
En una situación confusa, todo indicaría que la municipalidad no tendría documentación alguna por la cual acredite tener la propiedad y/o derecho sobre el terreno. Circunstancia que habría puesto sobre la mesa la denunciante, para solicitar que la justicia investigue y acuse penalmente a la Intendente de Monte Cristo por usurpación.
Datos accedidos por Enfoque Urbano, confirmaron que el receso judicial no habría sido impedimento alguno para que la causa siga su trámite, habiendo concurrido a la sede policial de Monte Cristo y al Juzgado de Paz, varios testigos, que serían más que importantes para que el fiscal resuelva si procedería a imputar a Verónica Gazzoni o no.
En definitiva, la justicia tendrá a su cargo, preciar a quien le corresponde el inmueble, pero lo que sí se sabe, es que la municipalidad no ha presentado o simplemente no tendría documentación alguna que le arrogue derecho sobre el mismo, ya que no existiría ningún procedimiento del Consejo de Deliberante por la cual se autorizara una expropiación.
Seguramente, en breve tiempo Verónica Gazzoni deberá dar explicaciones no sólo a los habitantes de nuestra ciudad, sino también a su arco político.
