La megacausa por presuntas estafas contra la firma Márquez y Asociados sigue sumando denuncias. En las últimas horas, un estudio jurídico acusó a las esposas de Juan Pablo y Ariel Hernán Márquez de formar parte activa de la empresa.
Según los abogados Agustín Goldszer y Gastón Arrambide Carroll, las mujeres no solo eran cónyuges de los principales socios, sino también empleadas de la firma, por lo que solicitaron al fiscal Enrique Gavier que las investigue por el delito de estafa.
La presentación judicial apunta a Carolina Sánchez Astrada y Romina Vanesa Nieva, quienes, según los denunciantes, tenían un rol ejecutivo dentro de la estructura de Márquez y Asociados. De acuerdo a la documentación presentada, ambas percibían sueldos elevados y figuraban empadronadas en una prepaga destinada a directivos de empresas, lo que, a criterio de los abogados, demuestra su participación activa en las maniobras ahora bajo investigación judicial.
Además, los denunciantes advirtieron que varios bienes de alto valor —como propiedades en zonas exclusivas y vehículos de lujo— están a nombre de los matrimonios en partes iguales, por lo que solicitaron el embargo total de esos activos. La estrategia busca evitar que el patrimonio vinculado a los Márquez quede fuera del alcance de los reclamos civiles, mientras se avanza en el esclarecimiento de uno de los mayores escándalos inmobiliarios de Córdoba.
