En medio de las discusiones internas entre las distintas fuerzas políticas de Córdoba, que mantienen a la mayoría de los referentes políticos sumergidos en conflictos internos, surge un reclamo desde un sector del radicalismo por la escasa actividad parlamentaria que se realiza en la Unicameral.
“La última sesión de la Legislatura de Córdoba se realizó el 30 de julio pasado, y la próxima sesión posiblemente será citada para el 20 de agosto, lo que evidencia claramente la falta de respeto a las instituciones y el poco compromiso del Gobierno de Martín Llaryora para tratar temas que son urgentes en la provincia, a los cuales no quieren dar respuestas ni poner la cara”, señaló el legislador Miguel Nicolás, cercano al espacio de Rodrigo de Loredo.
Apuntó que “temas como la inseguridad, la suba de impuestos y tarifas, contratos fantasmas, gastos en publicidad, presión fiscal, devolución del 82% móvil a jubilados, incentivos a empresas, Apross, salarios y pedidos de informes por actividades irregulares de ministerios y funcionarios, son algunas cuestiones que se siguen dilatando en el tiempo, por lo que los proyectos se acumulan en la Legislatura sin tratamiento”, agregó.
Según Nicolás, “hay falta de sensibilidad social y poco interés por parte del Gobierno provincial en resolver temas que son de gran trascendencia para la vida de todos los cordobeses”, ante lo cual remarcó: “esto hace que los legisladores de Llaryora se escondan tras sus bancas, para no dar tratamiento ni soluciones urgentes a numerosos asuntos que tienen que ver con la grave situación que se está viviendo en la provincia de Córdoba”.
