
Un mes después del martes 19 de agosto, cuando se conoció el primer audio de Diego Spagnuolo, este viernes, el presidente Javier Milei se despachó en Córdoba con una definición impresentable: que se trata de audios “de peluquería, hechos con inteligencia artificial” y este sábado agregó que “si Spagnuolo me hubiera dicho eso le habría volado la cabeza”. Por lo pronto, los contenidos de los audios ya fueron confirmados por uno de sus exasesores, Fernando Cerimedo, y por un productor de Alejandro Fantino, quienes contaron exactamente lo mismo: que Spagnuolo hablaba con quienes lo quisieran oír de las coimas en Discapacidad, que el papel central lo jugaba Eduardo Lule Menem y que “el 3 por ciento iba para la Casa Rosada”. Pero, además, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, denunció en su momento un super-complot, con participación hasta rusa, pero en el escrito no mencionó, ni remotamente, que podrían tratarse de audios hechos con IA. Lo mismo Karina Milei, que exigió que no se difundieran, luego desistió, pero no cuestionó que se trataran audios reales.
Se ve que el presidente tardó exactos 30 días para elaborar una especie de defensa, burda, respecto de las coimas en la Administración Nacional de Discapacidad (Andis). El 27 de agosto, o sea, hace 24 días, Milei hizo su primera manifestación pública respecto de los audios que 8 días antes difundieron los periodistas Mauro Federico, Ivy Cángaro y Jorge Rial: durante la frustrada caravana en Lomas de Zamora, el mandatario dijo “Spagnuolo es un mentiroso, lo vamos a denunciar”. Se ve que en 24 días, la Casa Rosada no tuvo tiempo de presentar ninguna denuncia contra Spagnuolo. Tampoco tuvo tiempo para denunciar a Hayden Davis, por el caso Libra.
Lo peor de la situación es que Milei llega tarde. Cuestionar los audios de Spagnuolo ya no sirve de mucho porque hay dos testigos que corroboraron su contenido.
*Cerimedo, dueño de La Derecha Diario, declaró bajo juramento que Spagnuolo le contó exactamente lo mismo que dice en los audios. Incluso los números coinciden: que la Suizo juntaba el dinero de las coimas, que subieron del 5 al 8 por ciento de la facturación, que el 3 por ciento iba para la Casa Rosada y quien manejaba las cosas era Eduardo Lule Menem. Además, mencionó que Spagnuolo afirmaba que le informó a Milei lo que estaba sucediendo y también a la ministra Sandra Pettovello.
*Agustín Rodríguez, socio de Alejandro Fantino, en el canal Neura, que igualmente declaró ante el fiscal Franco Picardi, repitió que Spagnuolo le contó que encontró muchas irregularidades en la Andis y que quien tenía el control era Lule Menem.
Parece grotesco que Milei salga a ejercer una débil defensa con un mes de atraso. La propia Karina, que en su momento desmintió que usara un reloj lujoso, y el presidente, que refuta a personas que lo contradicen todos los días y a todas las horas, no atinaron a contestar nada en 30 días. Karina podría haber dicho “esto es falso por esto, esto y esto”. No lo hizo. Y tampoco su hermano.
Este sábado, a las 11.17, la ministra Pettovello twiteó en defensa del gobierno: “No dejemos pasar esta chance irrepetible de poner a la Argentina de pie. @JMilei”. Como se ve, no dedicó ni una frase a decir, aunque sea, que Spagnuolo nunca le dijo nada sobre Andis. Sucede que el extitular de Discapacidad le está imputando un delito porque afirma que le informó de las irregularidades y ella, por ser funcionaria, debió denunciarlo. Aún así, Pettovello obvió el tema.
Cuando Milei hizo alusión, el viernes, a que los audios eran falsos, se alimentó la idea de que podría estar expresando algún tipo de acuerdo con Spagnuolo, instalando una línea de defensa común: cuestionar la veracidad de los audios. Sin embargo, el extitular de Andis no aceptó que la Casa Rosada le pusiera abogados, sino que finalmente optó por un defensor oficial, Hernán Silva. El letrado todavía no habló con Spagnuolo, recién lo hará el lunes o martes. En ese momento se verá si quiere sumarse al pedido de nulidad que hicieron los dueños de la Suizo, la familia Kovalivker, o si se presenta como imputado colaborador.
De todas maneras, al fiscal Picardi se le abren varios caminos.
*Llamar a declarar a la esposa de Cerimedo, Natalia Basil, que trabajó en la Andis y que podría estar al tanto de lo que sucedía en Discapacidad. Hay versiones que indican que Basil hasta tendría una carpeta con datos sobre las irregularidades.
*El fiscal también podría llamar a declarar al propio Fantino. Cuando entrevistó a Spagnuolo quedó muy expuesto que sabía de la existencia de las coimas, porque se lo advierte varias veces al exfuncionario y mencionando tácitamente a Lule.
*Como se conoció ayer, Spagnuolo borró mensajes de su celular el día antes de que su casa fuera allanada y que le secuestraran el Iphone. Tuvo cierta ventaja: los audios empezaron a darse a conocer el 19 de agosto y a Spagnuolo lo allanaron el 22 de agosto, o sea 3 días más tarde. Es que se había mudado a Pilar, a una casa que se construyó en estos años. De acuerdo al informe técnico, Spagnuolo hizo copia de lo que borró y lo transfirió a otros dispositivo. Picardi seguramente buscará dónde están esos mensajes. El propio extitular de Andis dijo en los audios que se guardó copia de los intercambios con Karina Milei.
*Picardi debe resolver si llama a declarar a Sandra Pettovello, aunque ella -al no haber hecho la denuncia- habría cometido un delito, entonces el fiscal tendrá que evaluar si corresponde convocarla como testigo.
*Por supuesto que está el estudio de los 600 contratos entre la empresa de los Kovalivker y Discapacidad. No es tarea fácil, pero será imprescindible.
Habrá que ver si la delirante defensa de Milei se traduce en alguna presentación judicial, aunque es improbable. El argumento de que los audios son chimentos de peluquería, hechos con IA, no tiene sostén alguno. Sólo exhibe lo perdida que está la Casa Rosada y que no sabe como responder a una acusación demoledora.
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