
La Justicia volvió a darle la razón a Luciana Salazar en su eterno enfrentamiento con Martín Redrado. Esta vez, el economista intentó imponerle un bozal legal para que no pudiera hablar más de él públicamente… pero no lo logró.
Según trascendió, el juez desestimó el pedido de Redrado al considerar que ambos son figuras públicas y que Luciana tiene derecho a contar su versión de los hechos. Además, se remarcó que él mismo también ha hablado del tema en los medios.
Detrás de esta disputa hay mucho más que declaraciones cruzadas. La pelea tiene como trasfondo un reclamo por el incumplimiento de un acuerdo económico relacionado con Matilda, la hija de la modelo. Redrado se había comprometido a asumir ciertas obligaciones, pero según Luciana, no las cumplió.
Como si fuera poco, el economista arrastra otras dos causas: una ya perdida por calumnias e injurias, y otra más grave, por una denuncia de extorsión en la que se lo acusa de presentar un testigo falso.
