El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, se manifestó públicamente tras el fallecimiento de la oficial ayudante Milagros Cuello, quien perdió la vida mientras cumplía funciones en un control vehicular en la ciudad de Oliva. El mensaje fue difundido a través de su cuenta oficial en la red social X.
En su publicación, el mandatario provincial expresó su acompañamiento a los seres queridos de la agente y a toda la fuerza policial: “Quiero expresar mis condolencias a la familia, amigos y compañeros de la oficial ayudante Milagros Cuello, joven integrante de la @PoliciaCbaOf, quien perdió la vida cumpliendo con su deber durante un operativo de control vehicular en #Oliva”. Además, subrayó que la provincia atraviesa un momento de profundo dolor:“Córdoba está de luto”.
Como gesto simbólico, Llaryora informó que el Centro Cívico permaneció a oscuras, en contraste con su iluminación habitual, “en señal de respeto y memoria”, como reconocimiento a la vocación, el compromiso y la entrega de la uniformada. También remarcó el pesar que atraviesa la institución: “La familia policial y la institución en su conjunto despiden con profundo dolor a una agente que honró su función y trabajó con responsabilidad al servicio de la comunidad”.
Finalmente, el gobernador fue enfático al calificar el hecho como “profundamente doloroso y absolutamente inadmisible” y reclamó penas más severas para quienes agreden o resisten a la autoridad policial. En ese sentido, reiteró su pedido a la Justicia provincial y al Congreso nacional: “Reitero el llamado a fiscales y jueces para que apliquen las penas máximas previstas por la ley” y solicitó “impulsar normas que establezcan sanciones más duras para quienes atentan contra uniformados”.
