
Mientras su ex se casaba en Córdoba, a Morena le cerraron su cuenta de Instagram y perdió su herramienta de trabajo. En plena prisión domiciliaria, tuvo que empezar de cero y lanzó un fuerte mensaje que sorprendió a todos.
No hay paz para Morena Rial. En medio de su prisión domiciliaria, vinculada a una causa por delitos graves, la hija de Jorge Rial recibió un nuevo golpe: le cerraron su cuenta de Instagram, donde había empezado a ofrecer sesiones de tarot online como forma de ingreso. La noticia se conoció justo el mismo fin de semana en el que su ex, Facundo Ambrosioni, se casaba en una emotiva ceremonia en Córdoba con Camila Triviño.
Lejos de quedarse en silencio, Morena abrió una nueva cuenta desde cero, donde ya acumula más de 19 mil seguidores, y la estrenó con una historia fulminante: “Aunque me quieran callar, no lo van a lograr”, escribió, dejando claro que no piensa desaparecer del mapa mediático. Además, sorprendió con un chisme inesperado sobre L-Gante: “Está de novio con Brenda Asnicar… jugaba a dos puntas”, lanzó sin filtro.
Con su proyecto de centro de estética detenido y la televisión aún lejana por sus problemas judiciales, More apuesta al tarot. “Es mi tarotista personal. La rompe”, aseguró su abogado y amigo Alejandro Cipolla, quien la apoya en este nuevo rumbo. Así, Morena se reinventa mientras espera el fallo de la Justicia, decidida a no quedarse atrás en el mundo del espectáculo.
