La furia de Sabrina Rojas tras ser tildada de “regalada”: “Es peligroso el nivel de machismo”

Luego de que una entrevista que le hicieron a Sabrina Rojas se viralizara por su polémico titular, la conductora salió a responderle al medio y los trató de machistas.

Sin embargo, aquel picante ida y vuelta entre ambos quedó trunco luego de que, aparentemente, el periodista se hubiera ido a dormir a la habitación de Julieta Poggio en los Martín Fierro.

En esa línea, el influencer Lizard los entrevistó juntos durante la fiesta y generó un momento en el que se insinuaba que Rojas tenía interés por ambos.

“Ay, ¡cuánto colágeno!”, comenzó diciendo la conductora, haciendo referencia a la edad de los jóvenes, y Salwe sumó: “Este es muy fachero, pregunta muy bien, es muy inteligente, muy rápido, te va a conquistar”.

“Si no lo hiciste vos, bebé, no lo va a hacer nadie”, deslizó Rojas, y Lizard remató: “Me ponés la vara muy alta con él al lado”. “Tiene su facha él también, viste”, siguió ella, insistiendo sobre su interés con Martín.

En ese momento, el entrevistador la felicitó por su estatuilla mientras le hablaba muy cerca de su boca y aprovechó para besarla en la mejilla. Sin poder brindar, terminaron compartiendo un trago, generando un momento de tensión entre ambos.

Aquel video fue levantada por la cuenta de Instagram Coherencia por favor, a la que siguen 1.3 millones de personas, y fue titulado “Sabrina Rojas tiene un moño en la cabeza”.

Lejos de pasar inadvertido, la conductora vio la definición que eligieron y se mostró furiosa.

Primero, les dejó un comentario en la publicación al escribir: “¿Perdón? Estoy poniéndole onda a dos pibes talentosos que se merecen una nota divertida. Y si me hubiese gustado alguno, o los dos juntos, ¿en serio yo tengo un moño? ¿Y si la situación es al revés? El tipo seguro que sería un genio, ¿no? ¡Por favor, coherencia!”.

Sin embargo, Rojas fue por más y también apuntó contra la cuenta en sus propias redes sociales, en donde arremetió con dureza en contra de Coherencia por favor.

Republicando la entrevista en una historia, escribió: “Varias cosas por este título ‘Sabrina tiene un moño en la cabeza’. O es mala leche o es una grave falta de interpretación o peor aún, si interpretó mal, es peligroso el nivel de machismo”.

Acto seguido, emitió una serie de puntos con los que defendió su postura: “1. Le estoy poniendo onda a una nota donde hay dos chicos talentosos y merecen que así sea”.

“2. Si la sabés interpretar, los que me tiran onda son ellos a mí (dije que no pudo uno, menos el otro). Justamente es la manera de decirles que soy difícil”, siguió Sabrina, y continuó: “3. El que me da un beso es uno de ellos, ¿y yo tengo un moño?”.

Como cuarto punto, planteó: “4. Si la situación fuese al revés, el tipo sería un capo. Jamás se le diría ‘tiene un moño en la cabeza’”. “5. Hay que ser básico para tomarse literal una nota que claramente es un juego”, escribió en su lista.

“6. Hacete honor a tu portal y tené un poco de coherencia y sentido común. Y, sobre todo, ¡menos machirulismo!”, cerró Sabrina, completamente furiosa.