Katy Perry dejó una huella imborrable en Argentina con dos shows repletos en el Arena de Buenos Aires. Más allá del despliegue escénico y el repaso por sus grandes éxitos, la cantante pop reveló una conmovedora historia sobre cómo se enfrentó a su entorno para concretar su gira sudamericana. “No vayas a Sudamérica, es demasiado caro, no vas a poder llevar todo tu escenario, vas a perder dinero”, fue el consejo que, según relató, recibió de su equipo.
Sin embargo, Perry decidió seguir su instinto y la profunda conexión con sus fans latinos. “Mis mayores fans están en Sudamérica”, afirmó ante la ovación del público argentino, y agregó: “Vamos a resolver esto, porque ustedes han sido mi familia desde el día uno. Desde el 2008 ustedes estuvieron ahí para mí”. Este gesto de lealtad y agradecimiento fue uno de los momentos más emotivos de su paso por el país, donde también levantó la bandera argentina al ritmo de “No llores por mí Argentina”.
El espectáculo brilló con una importante puesta en escena, pantallas de alta definición y un recorrido por sus grandes éxitos, incluyendo temas de su sexto disco “143”. El show mostró a una artista que, en este último año, lanzó nuevo material, viajó al espacio, se separó de Orlando Bloom y regresó a los escenarios con una propuesta.
