En lo que va de 2025, casi toda la región núcleo igualó o superó sus promedios históricos de lluvias, impulsada por un aporte extraordinario en julio que consolidó el arranque del trigo y elevó su condición a niveles excepcionales: 9 de cada 10 lotes se encuentran entre muy buenos y excelentes.
En el noreste bonaerense, los promedios anuales rondan entre 600 y 650 mm, pero las estaciones superaron ampliamente esos registros: Chacabuco acumuló 1.040 mm, Baradero 955 mm y Pergamino 761 mm. En el sur santafesino, Bigand registró 971 mm, Rosario 854 mm y Montes de Oca 825 mm. En el sudeste de Córdoba, Laboulaye marcó 718 mm y Bell Ville 676 mm.
Según el informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, este volumen de agua no solo sostiene la actual campaña fina, sino que también deja un piso muy favorable para la gruesa.
Trigo 2025/26: un presente inmejorable
Hace un año, la foto era muy distinta: 8% de los lotes estaban en estado regular y apenas un 3% calificaba como excelente. Hoy, de las 1,6 millones de hectáreas implantadas, solo el 1% presenta estado regular (menos de 20.000 ha), el 7% está bueno y el 93% alcanza las categorías de muy bueno a excelente.
Las reservas hídricas son de adecuadas a óptimas en el 60% del área, aunque en la franja oeste los perfiles muestran ajustes. Por el momento, el cereal no demanda demasiado: el 94% de los lotes se encuentra en pleno macollaje y el 6% en inicio de macollaje, fases de baja exigencia hídrica.
Pronósticos y alertas
Los modelos climáticos anuncian lluvias generalizadas a partir del martes 19, con chaparrones aislados el sábado 16 en el oeste de la región GEA. “La foto actual es la mejor de los últimos 3 o 4 años para el trigo”, señalaron desde Piedritas, en el noroeste bonaerense.
Sin embargo, los técnicos recomiendan monitorear la aparición de enfermedades, dado que en el sudeste cordobés ya se detectaron síntomas en algunas variedades.
