
La industria de videojuegos ha transitado cuatro décadas de innovación, pasando de entretenimiento de nicho a consolidarse como uno de los sectores culturales más influyentes a nivel mundial. Las estimaciones de PwC anticipan que el mercado global alcanzará los US$321.000 millones en 2026, mientras que Statista prevé ingresos de US$1.780 millones para el mercado argentino en 2025.
El recorrido histórico comenzó en las salas de arcade de los años ochenta, continuó con cartuchos de 16 bits y el avance al 3D, y llegó al gaming en la nube y los esports. Kevin Janzen, CEO del Games & Edtech Studio de Globant, recuerda: “En los 80 y 90 jugábamos en locales de arcade o en microcomputadoras como el Sinclair ZX Spectrum o el Commodore 64. Luego, las consolas como la Sega Genesis, Super Nintendo y la PlayStation trasladaron la diversión al living de casa. Hoy, un smartphone puede llevar en el bolsillo un universo de juegos”.
Evolución tecnológica y nuevos modelos de negocio
El desarrollo gráfico significó un cambio relevante con el salto del 2D al 3D, impulsado por títulos emblemáticos y placas gráficas como la Diamond Monster 3D para PC. Consolas como Dreamcast, PS2 y Xbox 360 facilitaron la llegada de gráficos fotorrealistas y experiencias online masivas. Janzen sostiene: “Hoy los gamers buscan no solo jugar, sino también optimizar su hardware, como ocurre con las tarjetas GeForce de Nvidia, para lograr más FPS, a veces casi como si fuera una obsesión”.
La conectividad a Internet permitió partidas cooperativas y competitivas, generó comunidades globales y propició nuevos modelos de negocio, como las microtransacciones y suscripciones. Este cambio también produjo debates sobre la preservación y propiedad digital: “Ahora lo que pagamos muchas veces es solo una licencia. Es más accesible, pero también más efímero”, advierte Janzen.
Inteligencia artificial y consolidación de los esports
La inteligencia artificial redefine la experiencia de juego al adaptar la dificultad e incentivar la personalización, aplicándose tanto en videojuegos actuales como en títulos clásicos. Janzen afirma: “La IA no solo hace que el juego sea más desafiante, sino que también lo mantiene vivo, adaptándose a cada jugador como si fuera un oponente humano”.
El mercado global de in-game advertising se proyecta en US$124.450 millones para 2025, con un crecimiento estimado hasta US$181.360 millones en 2030, según Statista. Los esports, por su parte, se consolidan como fenómeno internacional, con América Latina como semillero estratégico. En este contexto, 9z Globant, colaboración entre 9z Team y Globant, reúne talento regional y logros en títulos como Counter Strike, Valorant, Sim Racing y R6.
El avance tecnológico y la profesionalización de los esports posicionan a la industria de videojuegos como protagonista en la economía digital contemporánea.
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