
Una política de desregulación en la producción y comercialización de medicamentos, sumada a los malos hábitos de los argentinos, podría tener consecuencias muy graves para la salud, según lo manifestó Germán Daniele en Canal C.
Al referirse al “mercado negro”, el titular del Colegio de Farmacéuticos señaló que “es una cuestión casi cultural pensar que un medicamento adquirido en cualquier lugar no es nocivo”. En declaraciones al programa Bienestar, salud y la gente, que se transmite los jueves a las 14 hs, Daniele sostuvo que existe “una cultura altamente medicalizada”, porque “no se respeta el medicamento ni sus posibles consecuencias”.
“Tenemos naturalizado esto de manifestar un síntoma y que de inmediato te ofrezcan un medicamento. El mercado negro se nutre de esa idea de que ‘no pasa nada’, de creer que el medicamento es inocuo, como si fuera una golosina. Ese es el trato cotidiano que le damos”, remarcó.
Daniele indicó que, con esas prácticas habituales, lo que está en riesgo es la persona, y pidió “empezar a concientizar que ningún medicamento es inocuo. Todo medicamento, incluso los de venta libre, debe ser dispensado en una farmacia habilitada”, al tiempo que recordó: “existe normativa que exige esto; vender fuera de la farmacia es ilegal”.
El especialista recordó que su sector ya “padeció” la desregulación en los años ’90, lo que llevó a la creación de una ley provincial que impide la venta libre. “Fue tan nefasta la desregulación que aparecieron farmacias y laboratorios clandestinos. Ante los casos de intoxicación, los estados provinciales volvieron a regular”, explicó.
Sobre las muertes causadas por fentanilo adulterado, Daniele señaló que la situación habría sido aún más grave y probablemente desconocida “si no hubiera estado en un mercado regulado que disparó las alertas y permitió retirar el producto de inmediato”.
