
Mauro Icardi y Wanda Nara volvieron a verse las caras en una audiencia de divorcio que sigue en trámite en un juzgado de Milán. Según reveló Yanina Latorre, la reunión estuvo marcada por un fuerte conflicto, donde el futbolista no solo dejó en claro su intención de quedarse con los bienes compartidos, sino que también lanzó una frase contundente hacia Wanda: “Si me sale separarme de Wanda un millón de dólares, yo prefiero pagar 20 para destruirla”.

En medio del intercambio, Icardi dejó en evidencia su deseo de conservar los autos, propiedades y el control de los negocios que inició con Wanda, pero el punto más conflictivo fue la tenencia de sus hijas. Según Yanina, el futbolista planea que las niñas vivan con él en Turquía, donde ya estuvieron bajo su cuidado hasta el año pasado.
“Cuando él dijo que las nenas vayan a vivir con él, Wanda le preguntó si pretende que sus hijas se separen de su madre, familia y hermanos. ‘Sí. Yo quiero que vuelvan conmigo. Que vuelvan a vivir con mi novia y sus hijos a Turquía’, le dijo él”, relató Ángel de Brito.
La propuesta de Icardi generó rechazo inmediato, sobre todo porque Wanda rechazó la idea y la planteó como un conflicto mayor. Además, Yanina asguró que el plan que incluye a los hijos de la China Suárez, actual pareja del futbolista, enfureció a Benjamín Vicuña y Nicolás Cabré, padres de los hijos de la actriz.
