
La ciudad de Córdoba sigue en estado de shock tras el hallazgo de un cadáver en el departamento perteneciente a Gustavo Grasso, el expolicía condenado a 27 años de prisión por el crimen del pequeño Facundo Novillo, ocurrido en 2006 en barrio Colonia Lola. El macabro descubrimiento fue realizado por albañiles que estaban haciendo arreglos en la vivienda por encargo de Jorge Javier Grasso.

El hermano de Grasso no es un desconocido para los vecinos. De hecho, protagonizó varios episodios inquietantes en un edificio de avenida Colón al 600, donde vivía antes de mudarse al departamento del exoficial. Recientemente se conocieron unos videos que lo muestran espiando por las cerraduras de distintos departamentos.

Residentes del complejo lo describieron como una persona conflictiva, acusada de acosar al personal de limpieza y de administración. Algunas mujeres incluso cuentan con botón antipánico por el temor que les generaba.
A estos antecedentes se suma un episodio ocurrido en diciembre de 2024 en Ciudad del Este, Paraguay, donde Jorge Grasso fue detenido tras robar un bolso con 12 mil dólares en un shopping. Al regresar al lugar al día siguiente, fue reconocido por empleados y arrestado.
En ese momento solicitó ser tratado como mujer por constar como tal en su documento, aunque su nombre seguía siendo el mismo. Posteriormente fue deportado a Argentina, donde retomó su vida en Córdoba hasta este nuevo hecho que vuelve a ponerlo en el centro de la escena.