
En un giro trascendental de su política económica, el Gobierno nacional presentó oficialmente una batería de medidas bajo el nombre de “Plan de Reparación Histórica de los Ahorros de los Argentinos”. El objetivo central: ofrecer una vía segura y sin penalidades para que los ciudadanos que poseen dólares no declarados los incorporen al sistema financiero formal.
Uno de los anuncios más resonantes fue la modificación del umbral para transferencias electrónicas a través de billeteras virtuales. Según confirmó el titular de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), Juan Pazo, a partir de ahora las personas físicas podrán realizar transferencias de hasta $50 millones sin ser auditadas automáticamente por el organismo —un incremento del 2.400% respecto al tope anterior, que era de $2 millones. Para personas jurídicas, el límite se fijó en $30 millones.
Estas medidas forman parte de una estrategia del Ministerio de Economía para reducir la informalidad de los ahorros en moneda extranjera y facilitar su circulación dentro del sistema financiero. El vocero presidencial, Manuel Adorni, sintetizó el espíritu del plan con una frase contundente: “Tus dólares, tu decisión”.
Dos etapas, un mismo objetivo
El plan se divide en dos etapas. La primera será implementada vía decreto presidencial e incluye ajustes normativos inmediatos dentro de los márgenes legales del Poder Ejecutivo. En esta fase, organismos como la Unidad de Información Financiera (UIF) deberán adaptar su marco de control, permitiendo una adecuación operativa más ágil.
La segunda etapa contempla el envío de un proyecto de ley al Congreso. Este buscará blindar jurídicamente a quienes ingresen dólares al sistema, protegiéndolos ante posibles cambios regulatorios futuros. La intención del Ejecutivo es establecer un marco legal que impida persecuciones fiscales retroactivas por parte de eventuales gobiernos con criterios distintos.
Cambio de paradigma fiscal
Según explicaron las autoridades, se busca pasar de un modelo de presunción de culpabilidad fiscal a uno de presunción de inocencia. Esto significa que ya no se auditarán todas las operaciones por superar un monto arbitrario, sino únicamente aquellas donde existan indicios concretos de evasión o actividad ilícita.
“La instrucción del presidente Javier Milei fue clara: ofrecer previsibilidad y confianza a quienes tienen sus ahorros por fuera del sistema”, sostuvo Adorni durante la conferencia de prensa.
Incentivos para la bancarización
Otro eje clave del plan es incentivar la utilización de billeteras virtuales para reemplazar el uso de efectivo en grandes operaciones. Se estima que una porción considerable de los dólares en poder de los argentinos se encuentra fuera del circuito bancario, ya sea en cajas de seguridad, cuentas no registradas o incluso guardados en los hogares.
Al permitir transferencias millonarias sin auditoría automática, el Gobierno espera promover la trazabilidad de fondos y aumentar el uso de plataformas digitales como medio de pago e inversión.
Rol clave de la UIF y el sector fintech
La UIF deberá revisar sus estándares actuales para adecuarse al nuevo modelo de control. Esto podría traducirse en cambios sobre los reportes de operaciones sospechosas y las exigencias de identificación de usuarios en plataformas digitales.
Desde el sector fintech, las medidas fueron recibidas con expectativas positivas. Empresas del rubro anticipan un crecimiento en la operatoria y la captación de nuevos usuarios, tanto en pesos como en dólares.
Una oportunidad para regularizar sin miedo
Con el envío del proyecto de ley, el Gobierno busca dar un mensaje de estabilidad a largo plazo: quienes regularicen su situación no serán castigados en el futuro. El texto legislativo incluirá disposiciones para que esos contribuyentes no puedan ser perseguidos por haber ingresado fondos bajo el marco de este plan.
En suma, el “Plan de Reparación Histórica de los Ahorros” propone un nuevo contrato fiscal entre el Estado y los ciudadanos. Uno basado en la confianza, la legalidad y la garantía de que —esta vez— el sistema formal no será una trampa, sino una oportunidad.
