
A Evangelina Anderson siempre se la pudo imaginar reconociendo ciertos celos durante los más de 20 años que compartió con Martín Demichelis. La vida junto a un futbolista de élite, que luego dio el salto a la dirección técnica, sumada a la crianza de tres hijos y a las largas ausencias por partidos, giras y concentraciones, parece un contexto propicio para que aparezcan inseguridades.
No obstante, Eva sostiene que nunca fue una mujer celosa con sus parejas, aunque admite que hoy atraviesa esa sensación con Bastian, su hijo mayor, que ya está en pareja.

En diálogo con el Pelado López para Juego chino, cuando el conductor le consultó por su hijo adolescente y si ya habían surgido “las primeras noviecitas”, Eva lanzó un suspiro y respondió, resignada: “Lamentablemente”. Anderson confesó que está “lidiando” con los celos que le genera Tizi, la novia de su hijo de 16 años.
Este es el inesperado gesto que tuvo Evangelina Anderson con la novia de su hijo Bastian
“Soy celosa con mi hijo, no en las relaciones”, reconoció sin rodeos, y enseguida sumó: “Al principio estaba un poco triste pero lo estoy superando”.
Según contó, todo comenzó el día en que Bastian le confesó por primera vez que le gustaba una chica. Aclara que el conflicto no tiene que ver con la joven, a quien dice que “adora” y con la que se lleva “super”, sino con el vínculo especial que mantenía con su hijo y que hoy siente modificado.
Con visible emoción, la modelo explicó cómo percibe ese cambio de lugar: “Ahora todo gira en torno a su novia, antes estaba yo ahí”, dice mientras hace un gesto, como señalando un sitio privilegiado. “Y ahora está ella”, remata.
Sus recuerdos dejan en claro que esos celos iniciales no fueron leves. La propia Anderson relató un episodio incómodo que vivió ante una de las primeras novias pasajeras de Bastian. Al llevarlo a encontrarse con la chica, la situación se desbordó: “Bastian bajó del auto, arranqué, aceleré a fondo y me fui sin saludarla. Hasta el día de hoy no me lo perdona”.
Con el tiempo, Evangelina decidió trabajar lo que le pasa y admite que es un tema que aborda en terapia. Incluso sorprendió al contar un gesto que marca su intento de avanzar: junto a su hijo, decoró la habitación con flores, bombones y un osito para festejar el primer mes de noviazgo con Tizi.
Uno de los momentos más tiernos, y a la vez más reveladores, fue cuando intentó acercarse a la novia de su hijo, quien le pidió la receta de los bombones. Sin embargo, al momento de entregarlos, no pudo ocultar su incomodidad y optó por ponerse lentes de sol. “Me clavé las gafas Greta”, confesó, evidenciando lo difícil que le resulta adaptarse a esta nueva etapa.

Pese a atravesar esta “experiencia que no había vivido nunca”, Evangelina dejó en claro el orgullo que siente por el adolescente que crió. Destacó que Bastian “es caballero”, la “cuida la protege” y tiene “unos valores muy presentes”.
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