CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Un fiscal mexicano, que en los últimos años estuvo envuelto en una polémica tras ser detenido temporalmente señalado por encubrir un feminicidio, fue destituido el jueves por un congreso local poco después de solicitar el desafuero del diputado federal Cuauhtémoc Blanco, antiguo gobernador del estado de Morelos y exestrella del fútbol mexicano, para investigarlo.
La carrera de siete años de Uriel Carmona como fiscal del estado central de Morelos llegó a su fin luego de que la mayoría oficialista del Congreso estatal aprobó una propuesta presentada por la gobernadora, Margarita González, para suspenderlo por “haber dejado de cumplir con los requisitos de permanencia en el cargo”, según informaron medios locales.
Su destitución ocurrió luego de que la Fiscalía de Morelos presentó en la Cámara de Diputados una solicitud de desafuero de Blanco, del partido gobernante Morena, para investigarlo por una denuncia de supuesta violación que presentó en octubre del año pasado su hermana consanguínea. Hasta el momento, el congresista no se ha pronunciado sobre el caso.
Carmona se vio envuelto en una polémica cuando fue apresado el 4 de agosto de 2023 por agentes federales y estatales acusado de entorpecer la investigación del feminicidio de Ariadna Fernanda López, de 27 años, cuyo cuerpo fue localizado en una carretera del estado, vecino a la capital mexicana. Las pesquisas determinaron que el homicidio ocurrió en un edificio de la Ciudad de México y que ya estaba muerta cuando fue trasladada a Morelos.
El exfiscal fue quedó libre, pero luego fue detenido en tres oportunidades más por procesos abiertos por la Fiscalía de la Ciudad de México por los delitos de encubrimiento, feminicidio en calidad de auxiliador y tortura.
Tras una batalla judicial, Carmona salió en libertad el 22 de septiembre de ese año, y poco después retomó sus actividad como fiscal.
La mayoría de los ataques contra Carmona vinieron del oficialismo, en particular de la presidenta, Claudia Sheinbaum, quien cuando era alcaldesa de la Ciudad de México lo acusó de obstaculizar el caso de López “por presuntos nexos con el feminicida”, un hombre que se entregó a las autoridades, según dijo en su momento a la prensa, para demostrar su inocencia.
