Del ciclo OODA a la arquitectura SPAR: evolución doctrinaria en entornos operativos complejos

Las operaciones militares modernas se desarrollan en entornos cada vez más saturados, veloces y multidominios, donde la toma de decisiones tradicional basada en ciclos secuenciales enfrenta límites estructurales. Este artículo explora cómo la arquitectura SPAR redefine el paradigma de mando y control, superando el enfoque OODA frente a amenazas distribuidas y asistidas por inteligencia artificial.

Inspirado en el artículo titulado “Paradigm Shift in Warfare: From OODA to SPAR”[1] (Rivera, 2025) se presenta un análisis sobre la evolución de los ciclos de decisión militar en entornos de combate avanzados.

El ciclo OODA: origen, lógica y aplicación operativa [1]

El ciclo OODA (Observación, Orientación, Decisión, Acción), desarrollado por el coronel John Boyd en la década de 1950, ha sido durante décadas un pilar del planeamiento militar. Su esencia radica en la premisa de que la velocidad y la adaptación son claves para obtener una ventaja decisiva frente a un oponente. Al completar el ciclo más rápidamente que el adversario, se genera desorientación en su sistema de toma de decisiones, debilitando su capacidad de reacción.

Boyd diseñó este modelo a partir de su experiencia como piloto de combate, con el objetivo de comprender y optimizar la toma de decisiones bajo presión.

Aunque fue concebido en un contexto tecnológico muy distinto, su lógica secuencial continúa siendo eficaz en escenarios convencionales.

En el plano doctrinario conjunto de la OTAN, un Comandante de Fuerza Conjunta (JFC) emite su OPLAN (Operational Plan) de manera casi simultánea con la planificación específica de los comandantes de componente (JFACC – Joint Forces Air Component Commander, JFLCC – Joint Land Component Commander, JFMCC – Joint Maritime Component Commande, otros), quienes elaboran sus respectivos SUPLAN (Support Plan). Una vez aprobados los planes, el JFC distribuye las Directivas y Guías (D&G) generales de la campaña, la Orden de Coordinación Conjunta (JCO) entre los diferentes componentes, y la Lista de Blancos Priorizados (PTL), asignada a cada uno de ellos como insumo inicial para la ejecución.

En el caso del componente aéreo, la orientación se plasma en la Air Operation Directive (AOD), elaborada por el estado mayor del JFACC. A partir de esta AOD, el Combined Air Operations Center (CAOC) desarrolla el MAOP (Master Air Operations Plan), que una vez aprobado, da lugar a la Air Tasking Order (ATO). Esta se emite diariamente contemplando la ejecución de todas las misiones aéreas del día siguiente.

Durante la fase de ejecución, el equipo de Current Operations (COPS) en el CAOC aplica una versión abreviada del ciclo OODA para monitorear y adaptar las operaciones en tiempo real. Esta práctica ha demostrado ser eficaz en escenarios lineales y relativamente predecibles, donde la información está centralizada y los tiempos de respuesta pueden ser gestionados por equipos humanos.

La arquitectura SPAR

SPAR no es simplemente una evolución del ciclo clásico OODA (Observar, Orientar, Decidir, Actuar), sino un nuevo paradigma operativo y cognitivo que surge ante la necesidad de operar en entornos caracterizados por alta complejidad, velocidad e incertidumbre. Su diseño parte de la premisa de que los modelos secuenciales y centralizados son ineficaces frente a amenazas distribuidas, dinámicas y apoyadas en tecnologías disruptivas como la guerra electrónica, los enjambres de drones o la desinformación digital.

A diferencia del OODA, que es inherentemente lineal, centralizado y dependiente del factor humano, SPAR propone una arquitectura distribuida, asincrónica y parcialmente autónoma, capaz de sostener operaciones en escenarios con degradación o negación del espectro electromagnético.

Veamos en detalle cada componente:

1.     Sense (Sensar)

Esta fase no se limita a observar el entorno, sino que lo hace de manera persistente, autónoma y en múltiples dominios: terrestre, aéreo, naval, cibernético y espacial. Utiliza sensores multiespectrales (infrarrojos, LIDAR, radar AESA, sensores electromagnéticos, acústicos), redes ISR (Intelligence, Surveillance, Reconnaissance) y herramientas de guerra cibernética.

Lo distintivo de SPAR es que la recolección no es pasiva ni jerárquicamente ordenada: los sensores operan en red, comparten información entre nodos y se ajustan dinámicamente según el entorno. Esto permite tener una visión táctica y operativa hiperlocal y simultáneamente global, incluso cuando los nodos están aislados o en movimiento.

2.     Perceive (Percibir)

Aquí se diferencia claramente del OODA tradicional. SPAR no espera una “orientación” humana central; en cambio, utiliza algoritmos de inteligencia artificial, fusión de datos y aprendizaje automático para construir un modelo cognitivo del entorno: identifica patrones, amenazas, rutas óptimas, debilidades enemigas y oportunidades tácticas en tiempo real.

Esta percepción no es universal ni fija: cada nodo (un dron, un radar, una batería de defensa aérea) percibe de forma autónoma según su función, pero dentro de parámetros doctrinarios establecidos. La arquitectura favorece la autonomía local con coherencia estratégica.

3.     Act (Actuar)

La gran diferencia con los modelos clásicos es que SPAR descentraliza la acción. En lugar de requerir autorización desde el nivel operacional o estratégico, los sistemas pueden actuar dentro de “franjas de decisión autónoma” previamente definidas.

Esto permite que un enjambre de drones ataque o se repliegue según su percepción del entorno, o que una unidad de defensa electrónica altere su configuración sin necesidad de esperar órdenes. Este enfoque aumenta drásticamente la velocidad del ciclo operativo y mejora la resiliencia en condiciones de guerra multidominio.

4.     Reassess (Reevaluar)

La arquitectura SPAR está en constante revisión y aprendizaje. Cada acción genera un efecto, y ese efecto es evaluado en tiempo real por el sistema. Si hay desviaciones, fallas, efectos no deseados o nuevas amenazas, el sistema se adapta.

Este principio de retroalimentación inmediata y distribuida es vital para enfrentar adversarios que también emplean inteligencia artificial, spoofing, jamming o maniobras de engaño. La reevaluación no es una etapa final: es continua, local y colectiva, lo que permite un proceso de aprendizaje dinámico, tanto del entorno como del adversario.

Consideraciones doctrinarias y estratégicas

La arquitectura SPAR se adapta perfectamente a las amenazas que enfrenta el Iron Dome israelí o bien, a la arquitectura necesaria para poder detener una operación similar a la Operación Telaraña lanzada por Ucrania contra bases rusas, las cuales serían inviables sin este tipo arquitectura.

Si bien, el ciclo OODA fue eficaz durante décadas y se adapta perfectamente a entornos convencionales, hoy enfrenta límites estructurales debido a:

  • El volumen de datos que excede la cognición humana.
  • Adversarios con IA que ejecutan decisiones en milisegundos.
  • La necesidad de respuestas simultáneas en múltiples dominios.
  • La velocidad de adaptación que impone la guerra algorítmica.

Por su lado, la arquitectura SPAR no reemplaza al ciclo OODA, pero lo supera doctrinariamente en al menos cuatro aspectos clave:

  • Distribución de la decisión: cada nodo opera con autonomía relativa.
  • Flexibilidad adaptativa: los ciclos se ejecutan localmente en paralelo.
  • Menor dependencia de comunicaciones persistentes.
  • Mayor tolerancia al entorno caótico o degradado.

Por lo cual, es especialmente aplicable donde los aspectos previamente citados se presentan con mayor posibilidad en enjambres de drones y defensa antimisil de nueva generación.

Obstáculos para la implementación de SPAR

Aunque no todos los países pueden acceder a la tecnología necesaria para implementar esta arquitectura, aquellos que sí la posean deberán enfrentar una serie de obstáculos, a saber:

  1. Automatización sin supervisión adecuada (autonomía descontrolada): En su forma más avanzada, SPAR permite que sistemas actúen sin intervención humana directa. Esto puede derivar en decisiones letales fuera del marco legal o ético. Para evitar ello se debería mantener un “human-on-the-loop” en escenarios críticos, al menos en fases de verificación de fuego o asignación letal.
  2. Falta de explicabilidad y trazabilidad (black box problem): Los algoritmos de IA que sustentan SPAR pueden tomar decisiones complejas que ni sus desarrolladores ni los operadores pueden explicar con claridad. Una forma de mitigarlo es desarrollando IA explicable (XAI), sistemas con “registro de decisiones” y documentación clara del razonamiento del sistema.
  3. Cibervulnerabilidad y manipulación informacional: Al depender fuertemente de sensores distribuidos y redes interconectadas, SPAR es vulnerable a ataques cibernéticos, spoofing o engaños por parte del adversario. Por ello, debe prever un endurecimiento cibernético, redundancia de sensores, validación cruzada de fuentes y protocolos de verificación por humanos.
  4. Escalada no intencionada por decisiones autónomas mal interpretadas: Una reacción automática mal calibrada (por ejemplo, defensa antiaérea contra un vuelo no identificado) puede generar una espiral de escalamiento no deseado, incluso en escenarios de disuasión. Para evitarlo se debe definir límites estrictos de autonomía con reglas de empeñamiento (ROE) programadas en los sistemas y alertas de intervención manual en fases sensibles.
  5. Incompatibilidad con aliados o socios de coalición: Diferentes niveles de adopción de IA y SPAR en fuerzas multinacionales pueden generar descoordinación operativa o fricciones en la interoperabilidad. Por ello se debe establecer estándares comunes de interoperabilidad y reglas compartidas de activación/desactivación de funciones autónomas.
  6. Asimetría estratégica y carrera armamentista en IA: Una implementación masiva de arquitecturas SPAR puede acelerar la competencia por capacidades autónomas, reduciendo los tiempos de verificación ética o legal, dando lugar a proliferación de sistemas de decisión autónoma sin supervisión suficiente. Aunque más difícil de implementar, se debería impulsar acuerdos multilaterales sobre el uso responsable de IA militar y fomentar transparencia en doctrinas de autonomía.
  7. Dificultades legales para atribuir responsabilidad: Cuando un sistema SPAR comete un error letal, ¿quién es el responsable? ¿El programador? ¿El operador? ¿El comandante?. Actualmente existe un vacío legal, lo cual implica un riesgo para el cumplimiento del Derecho Internacional Humanitario (DIH) y desafíos en foros judiciales. Habría que definir doctrinas claras de responsabilidad compartida, auditar los sistemas con trazabilidad completa y mantener la supervisión humana en decisiones críticas.

Una solución intermedia: adaptar el ciclo OODA con inteligencia artificial

Como se ha observado, la arquitectura SPAR —aunque más eficiente en entornos operativos disputados y dinámicos— presenta importantes desafíos para su implementación, especialmente en aquellos países que no cuentan con los recursos tecnológicos, doctrinarios u organizativos necesarios para adoptarla plenamente.

Por otro lado, el modelo OODA potenciado con inteligencia artificial (OODA + IA), si bien mantiene una estructura jerárquica, centralizada y dependiente de la supervisión humana, representa una alternativa intermedia viable. Este enfoque permite incrementar progresivamente la integración de capacidades basadas en IA dentro de los sistemas de planeamiento militar, sin requerir una transformación doctrinaria completa. No obstante, en operaciones saturadas o hiperveloces, su rigidez estructural puede generar cuellos de botella e incluso derivar en el colapso del proceso decisional.

Las mejoras que podrían obtenerse al aplicar inteligencia artificial en las distintas fases del ciclo OODA son:

  • Observar: La IA amplía la capacidad de detección, filtrando datos relevantes entre miles de señales, sensores y fuentes abiertas, lo que permite visualizar cambios en la situación táctica en tiempo real.
  • Orientar: A través de análisis predictivos y simulaciones, los sistemas reducen la carga cognitiva humana y proponen cursos de acción (COAs) optimizados.
  • Decidir: La IA actúa como un asesor en la toma de decisiones, evaluando múltiples variables y anticipando reacciones adversarias, para diseñar el mejor empleo de los medios disponibles.
  • Actuar: En combinación con sistemas automatizados, las decisiones se traducen en acciones rápidas, coordinadas y con capacidad de adaptación en tiempo real.

Conclusión

La transición del ciclo OODA hacia la arquitectura SPAR no representa una simple evolución técnica, sino una transformación estructural en la forma de concebir, ejecutar y adaptar las operaciones militares en el siglo XXI. En un entorno donde la velocidad de adaptación supera al volumen de fuego, y el espacio de batalla multidominio exige simultaneidad en la acción, el modelo SPAR ofrece una respuesta doctrinaria más acorde a las exigencias contemporáneas.

Adoptar este paradigma requiere cambios no solo tecnológicos, sino también doctrinarios, legales y organizativos. El desafío no consiste en reemplazar lo humano, sino en potenciar su juicio mediante sistemas capaces de operar con autonomía responsable, dentro de marcos éticos verificables. La inteligencia artificial no es un fin en sí mismo, sino un medio para alcanzar una superioridad decisional basada en la adaptación, la sincronización y la resiliencia. En los conflictos del futuro, toma mayor relevancia la premisa de que la ventaja la tendrá quien decida mejor y más rápido. SPAR puede marcar esa diferencia.

Sin embargo, para aquellos países con menores recursos, la implementación de inteligencia artificial en las fases del ciclo OODA puede constituir una etapa intermedia válida, permitiendo acelerar los procesos de toma de decisiones, mejorar la evaluación de grandes volúmenes de datos y, al mismo tiempo, conservar el control humano dentro del ciclo decisional. Esta adaptación progresiva puede servir como puente hacia modelos más autónomos y distribuidos en el futuro.


[1] https://www.linkedin.com/posts/angel-rojo-b4793927_cambio-de-paradigma-en-la-guerra-de-ooda-activity-7336543511405604864-Vk1d?utm_source=share&utm_medium=member_desktop&rcm=ACoAAAWn0icB7njhrhA09VYR90vinJFddHZjd_A

[2] Extraído del CEMAC (Curso de Estados Mayores Aéreos Combinados – ESGA)

*Fotografía de portada empleada con fines ilustrativos.

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fuente: GOOGLE NEWS

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