
Recientemente, la llamada “Oficina Comercial y Cultural de Taipéi en Argentina”, en nombre de la representante Florencia Miao-hung Hsie, ha difundido en los medios de comunicación argentinos sus falacias secesionistas, que ignoran la historia y distorsionan los hechos, exponiendo la clara intención de dividir a China y socavar la base política de las relaciones entre China y Argentina. La Asociación para la Promoción de la Reunificación Pacífica de China en Argentina reacciona y expresa su firme oposición a estos absurdos y perversos argumentos, y declara solemnemente lo siguiente.
Primero. El hecho histórico y jurídico de que Taiwán forma parte de China es innegable. Documentos con validez legal internacional, como la Declaración de El Cairo, la Proclamación de Potsdam y los Términos de la Rendición de Japón, ratifican la soberanía de China sobre la región de Taiwán. El denominado Tratado de San Francisco carece de legitimidad y validez, pues fue suscrito tras la Segunda Guerra Mundial en el marco de una reconciliación unilateral de algunos países con Japón, sin la participación de la República Popular China, y en abierta contradicción con la Carta de las Naciones Unidas y los principios fundamentales del derecho internacional.
Segundo. En 1971, con la adopción de la Resolución 2758, la Asamblea General de la ONU reconoció a la República Popular China como el único representante legítimo de toda China, incluida Taiwán, en las Naciones Unidas. Antes de su aprobación, la Asamblea había rechazado de manera categórica las propuestas de “dos Chinas” y de “una China, un Taiwán con autodeterminación”. Esto significa que, sobre la base del reconocimiento de que Taiwán es parte integrante de China, las Naciones Unidas restauraron al Gobierno de la República Popular China la representación y el escaño correspondiente a todo el territorio chino, incluida Taiwán. El ámbito territorial del sujeto de derecho internacional denominado “China” nunca se ha visto alterado, y la condición de Taiwán como parte inseparable de China jamás ha cambiado. Nunca ha existido la cuestión de “dos Chinas” ni de “una China, un Taiwán”.
Tercero. La cuestión de Taiwán nunca ha sido un asunto de “autonomía política” ni de “autodeterminación democrática”, sino una cuestión de soberanía e integridad territorial de China. Los recientes fracasos de las maniobras políticas promovidas por las autoridades del Partido Democrático Progresista en Taiwán, incluidos los intentos de destitución masiva de representantes, ponen de manifiesto que cualquier intento secesionista de “independencia de Taiwán” carece de respaldo popular y está condenado al fracaso. Taiwán pertenece a todo el pueblo chino, y su futuro solo puede y debe ser decidido por la voluntad conjunta de los más de 1.400 millones de chinos, incluidos los compatriotas taiwaneses, y nunca por un reducido grupo de fuerzas secesionistas.
Reafirmamos que los compatriotas a ambos lados del estrecho de Taiwán comparten un mismo origen, una misma cultura y una misma identidad étnica; somos una sola familia unida por lazos de sangre y un destino común. La reunificación completa de la patria es una aspiración compartida y una responsabilidad sagrada para todos los chinos. Estamos convencidos de que, mediante los esfuerzos mancomunados de todos los chinos, la gran causa de la reunificación nacional se alcanzará sin duda alguna, y el sueño chino de la gran revitalización de la nación se convertirá en realidad.
Asociación para la Promoción de la Reunificación Pacífica de China en Argentina
OTRAS CARTAS
Reclama que faltan carteles que identifiquen calles
La Ciudad de Buenos Aires, desde hace años, no tiene carteles que indiquen el nombre de muchas calles. Quien no conozca la ciudad y necesite buscar una dirección determinada tendrá que recurrir a la ayuda de algún transeúnte.
Quise reclamar a través de la app MiBA, pero el sistema no me permitió subir las fotos, y cuando quise enviar el reclamo sin fotos, un cartelito me instaba a subirlas. Llamé al 147, el operador me informó que lo que tenía que hacer era concurrir a una oficina comunal con las fotos. ¿De verdad el Gobierno porteño espera que los vecinos perdamos tiempo y concurramos a los centros comunales (que atienden hasta las 15) para cada reclamo, porque las aplicaciones no funcionan y los operadores parecieran estar sólo para derivar a la web o a un centro comunal?
Quisiera saber cuál es el número de empleados que tiene la ciudad, entre ellos seguro hay algún responsable de “señalización en vía pública” que cobra sueldo por una tarea mal hecha. Esta es una de las varias falencias de la ciudad y nadie se hace cargo.
Alicia Olivo ayurlivo@yahoo.com.ar
En un mitin en Rosario, a principios de la década del ’50, en pleno discurso, Ricardo Balbín recibió una pedrada por parte de sus opositores. El dirigente radical, lejos de amilanarse, y con su reconocida agilidad mental, sostuvo: “Nos han enviado su tarjeta de presentación”. El presidente Milei debería haber empleado la misma frase cuando fue atacado, recientemente, en Lomas de Zamora. Con el mayor de los respetos, el tiempo pasa y siguen siendo incorregibles.
Roberto A. Meneghini dr.meneghini@hotmail.com
Pensar en el otro…
Está comprobado que toda situación de vulnerabilidad se transita mejor con una compañía segura y protectora. A la gente le preocupa no llegar a fin de mes trabajando como un burro. Pero estoy segura que hasta la peor situación se sostiene con vínculos que se preocupan y te sostienen. Hay que tener sensibilidad social y ofrecer ayuda desde una posición activa de compromiso y presencia. Dejen de pensar qué estrategias de política pública nos va a salvar. Lo que nos va a hacer salir es pensar en el otro y darle la importancia que se merece. El amor en la acción es lo que vale, lo demás es publicidad berreta.
Veronica Ciolli Ceccato Vciolliceccato@yahoo.com.ar
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