A partir de mayo de 2025, las escalas de facturación para los monotributistas se mantienen vigentes con las actualizaciones semestrales basadas en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), como parte del régimen simplificado implementado por la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA). Estas modificaciones tienen como objetivo reflejar el impacto de la inflación sobre las capacidades de facturación de los contribuyentes.
Recategorización Semestral Obligatoria
Es fundamental que los monotributistas estén al tanto de la recategorización semestral obligatoria, que será efectuada en julio de 2025. Esta medida obliga a los contribuyentes a ajustar su categoría fiscal en función de su facturación anual. Si no se presenta la declaración correspondiente dentro del plazo estipulado, ARCA realizará una recategorización de oficio, lo que podría derivar en sanciones económicas para aquellos que no cumplan con los plazos establecidos.
Límites de Facturación por Categoría
Con la actualización de mayo de 2025, las nuevas escalas de facturación anual para las categorías del Monotributo son las siguientes:
- Categoría A: $ 7.813.063,45
- Categoría B: $ 11.447.046,44
- Categoría C: $ 16.050.091,57
- Categoría D: $ 19.926.340,10
- Categoría E: $ 23.439.190,34
- Categoría F: $ 29.374.695,90
- Categoría G: $ 35.128.502,31
- Categoría H: $ 53.298.417,30
- Categoría I: $ 59.657.887,55
- Categoría J: $ 68.318.880,36
- Categoría K: $ 82.370.281,28
Estos valores representan los límites anuales de facturación que un monotributista puede alcanzar para pertenecer a cada categoría. Es importante destacar que estas escalas no son fijas y se ajustan semestralmente para adaptarse a los cambios económicos, en especial a la variación de la inflación.
¿Qué pasa si no te recategorizas a tiempo?
Si no realizas la recategorización dentro del período estipulado, ARCA llevará a cabo una recategorización de oficio, lo que podría generar costos adicionales o incluso sanciones por no cumplir con las obligaciones fiscales. Es fundamental estar atento a las fechas y presentar la declaración para evitar inconvenientes.
Con estos nuevos límites, los monotributistas deberán evaluar su situación fiscal y determinar si deben recategorizarse a una nueva categoría o mantenerse en la actual, de acuerdo a su nivel de facturación anual
