Un conductor fue detenido el jueves por la tarde, feriado de Navidad, mientras circulaba por la ruta nacional 226, a la altura del kilómetro 64,5, en el partido de Balcarce, tras registrar una alcoholemia tan elevada que los dispositivos no pudieron medirla.
El hecho ocurrió durante un operativo de control vial del Ministerio de Transporte de la provincia de Buenos Aires, luego de que la Policía Vial alertara sobre un vehículo que realizaba maniobras peligrosas y ponía en riesgo tanto su vida como la de terceros.
Al ser sometido al test de alcoholemia, los dispositivos arrojaron un resultado de “desbordamiento de rango”, lo que indica que el nivel de alcohol en sangre superaba la capacidad máxima de medición de los equipos. Se trata de un registro ampliamente superior al permitido por la Ley de Alcohol Cero, vigente en territorio bonaerense.
Ante esta situación, se labró la infracción correspondiente, se retuvo el vehículo y se dispuso que un conductor alternativo se hiciera cargo del rodado. El infractor quedó a disposición del proceso judicial.
Desde el Ministerio de Transporte advirtieron que niveles superiores a los 3 gramos de alcohol por litro de sangre provocan una grave depresión del sistema nervioso central, pérdida de reflejos y riesgo de pérdida de conocimiento, condiciones totalmente incompatibles con una conducción segura.
Las autoridades remarcaron que estos controles buscan prevenir siniestros viales y evitar tragedias provocadas por conductas irresponsables al volante.
El balance en la Ciudad
Como todos los años, el Gobierno porteño puso en marcha el operativo de controles de alcoholemia que en la noche de Navidad, y según las estadísticas oficiales, identificó a 30 conductores con test positivo. Once de ellos con un dosaje superior a 1 gramo por litro de alcohol en sangre. El más grave fue el caso de un automovilista que circulaba con 1,74 gr/l.
En estas fiestas, la Ciudad implementó una novedad: amplió a todo el territorio lo que desde 2020 se denomina “zona calma”. Se trata de una normativa que hasta ahora prohibía el uso de todo tipo de fuegos artificiales con efecto audible en un radio de 100 metros de distancia de las Reservas Ecológicas Norte y Sur, Lago Lugano, Ecoparque y hospitales.
Los límites vigentes en Ciudad son 0,5 gr/l para conductores de autos particulares; 0,2 gr/l para motociclistas y 0,5 gr/l para su acompañante, y cero para principiantes y conductores profesionales.
Este año se hicieron 5.394 testeos y la tasa positiva fue del 0,47%, mientras que el año pasado se habían realizado 5.399 controles, con una tasa del 0,83%. En lo que va del año se retuvieron 4.300 licencias.
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