Ángela Leiva se cansó del silencio y salió con los tapones de punta. La cantante argentina fue señalada como “estafadora” por no presentarse a cantar en el festival Vendimia Chapaca, en Tarija, Bolivia, el pasado 1 de marzo. Tras semanas de críticas en redes sociales y medios locales, Leiva publicó un contundente comunicado en Instagram, donde explicó por qué se canceló el show y apuntó directamente contra los organizadores del evento.
“Llegamos una hora antes del horario pactado y el escenario recién fue entregado a las 2 de la mañana, justo cuando comenzó una lluvia torrencial que mojó todo, incluidos instrumentos y equipos técnicos”, relató la artista. Según explicó, el escenario no contaba con las condiciones de seguridad mínimas: techo de lona, paredes de tela y un camarín que brillaba por su ausencia. A pesar de eso, los organizadores querían que el show se hiciera igual. “Nos querían obligar a tocar, poniendo en riesgo a todos los presentes”, denunció.
Además, Leiva aseguró que intentaron reprogramar la fecha, pero del otro lado solo recibió acusaciones. “Intentaron volcar toda la responsabilidad sobre mí, manchando mi nombre y reputación”, escribió indignada. Y dejó una frase demoledora: “El tema está en manos de mis abogados. Obviamente, no voy a permitir que se me use para tapar una muerte”. Con esas palabras, dejó en claro que la pelea recién empieza.
