Adaptarse a los cambios: cómo la planificación estratégica ayuda a enfrentar la incertidumbre

La creciente incertidumbre y la aceleración del cambio han puesto en jaque a las organizaciones públicas y privadas. En este contexto, hay entidades que desarrollan herramientas que permiten a las instituciones enfrentar este contexto.

Una de ellas es la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que realizó una misión en Córdoba la semana pasada para dialogar con actores públicos y privados, y llevar su propuesta basada en la planificación estratégica, con la idea, además, de apoyar la Agenda Estratégica Córdoba 2035.

Parte de la agenda incluyó dos conferencias que contaron con la participación de Javier Medina Vásquez, secretario ejecutivo adjunto de la Cepal, y el analista político Daniel Zovatto, global fellow (integrante global) del Programa de América Latina del Wilson Center, organizadas por el Consejo para la Planificación Estratégica de Córdoba (Copec).

En diálogo con La Voz, los especialistas advirtieron que las organizaciones deben adaptarse a las transformaciones y a la cada vez mayor velocidad de los cambios; para eso, herramientas como la planificación estratégica son fundamentales.

Un ejemplo es lo que sucede en la política y la tensión entre la rapidez con la que evolucionan la sociedad y la tecnología, y la lentitud de los procedimientos democráticos e institucionales. Según Zovatto, las instituciones públicas diseñadas bajo paradigmas políticos de los siglos XIX y 20 actualmente tienen dificultades para gobernar las complejas sociedades del siglo 21. Esto genera un importante malestar social y frustración, que se ven exacerbados por la polarización ideológica en las redes sociales.

Para el politólogo, los líderes outsiders, políticos populistas, autoritarios, antisistema y personalistas, ofrecen soluciones rápidas a problemas complejos, capitalizando el hartazgo con la política tradicional. Esto deriva en lo que llama “la bukelización de la política”, una revolución política que promete resolver problemas a cambio de una cesión de libertades y derechos, o del sacrificio de ciertos procedimientos democráticos o institucionales.

Para Medina Vásquez, las organizaciones deben desarrollar capacidades de gobernanza anticipatoria y aplicar herramientas como planificación estratégica y prospectiva, para abordar los desafíos que se vienen a mediano y largo plazo.

“La prospectiva no busca predecir el futuro, sino contribuir a pensar en alternativas y preparar respuestas institucionales ante posibles cambios”, dijo el ejecutivo de la Cepal. Ante cambios que son inevitables, imaginar escenarios, crear visiones y generar respuestas institucionales ágiles; “no vas a poder evitar los cambios, pero vas a tener capacidades que permitan enfrentarlos”, agregó.

Cisnes negros y rinocerontes grises

Zovatto propuso la siguiente categorización: en el mundo hay “cisnes negros” (eventos impredecibles de gran impacto) y “rinocerontes grises” (problemas visibles que se ignoran). Hay eventos que son inherentemente sorpresivos, pero muchas crisis son precedidas por señales claras que no se atienden debidamente. “La pandemia fue un cisne negro, pero los finlandeses tenían mascarillas acumuladas por si venía un cisne negro. Nosotros no teníamos, debíamos comprarlas a China, de donde venía el virus”, agrega.

De igual manera, agrega el politólogo, la inteligencia artificial es una “amenaza existencial” que requiere una adaptación profunda de nuestros modelos mentales e institucionales.

Tanto la pandemia como el presidente estadounidense Donald Trump aparecen como aceleradores de tendencias que ya se anunciaban previamente. Según Zovatto, esto vuelve a poner en el centro del debate la frase del periodista y escritor estadounidense Thomas Friedman: “El problema no es la cantidad de cambios, sino el cambio en la velocidad del cambio”.

Esta reconfiguración del orden global obliga a pensar posibles escenarios que pueden generar determinadas situaciones. En este contexto, hay que sostener estrategias de desarrollo, basadas en la integración de las organizaciones a las cadenas de valor y el libre comercio, para darle agilidad y capacidad de respuesta rápida y de análisis de los escenarios. Estas estrategias deben entenderse como un ejercicio permanente.

“Ya no se trata de una tarea de expertos, sino de la sociedad; hay que movilizar la inteligencia colectiva y estimular el aprendizaje que también es colectivo. Aprender es la capacidad de modificar tus comportamientos y tus modelos mentales. Lo que vemos hoy es que cambian los contextos, pero no podemos cambiar los modelos mentales”, resalta el ejecutivo de la Cepal.

Medina Vásquez pone el acento en el desarrollo de capacidades técnicas, operativas, políticas y prospectivas para responder al cambio. La organización está trabajando en identificar nuevas fuentes de crecimiento, marco en el cual destaca el potencial de los clústeres, como los 28 que funcionan en Córdoba, como el tecnológico, el automotriz, la maquinaria agrícola y la soja.

Sobre esto, el secretario ejecutivo de la Cepal dijo: “Hay territorios que vienen haciendo bien las cosas, que están generando oportunidades. Córdoba tiene condiciones muy interesantes de diálogo social, de interacción público-privado, con la participación del sector académico y la sociedad civil, múltiples mecanismos de mediaciones y redes que facilitan las respuestas institucionales efectivas. El Copec puede generar esta posibilidad. La cuestión no es hacer sólo prospectiva, sino que esa prospectiva se conecte con las políticas públicas en todos los niveles de poder”.


fuente: LAVOZ

Artículos Relacionados

Volver al botón superior

Adblock Detectado

Considere apoyarnos deshabilitando su bloqueador de anuncios